Según el abogado del acusado, la caída fue fatal para la víctima. El fiscal quiere que El B. sea condenado por homicidio. Según ella, agarró al repartidor por el cuello, lo golpeó, le propinó puñetazos y patadas en la cabeza y el estómago cuando yacía en el suelo. Sin embargo, el sospechoso dice que surgió una discusión entre él y el repartidor de paquetes y que se sintió obligado a defenderse.
El conflicto surgió cuando el sospechoso vio al repartidor de paquetes conduciendo su autobús en la calle de su distrito Meeuwenplaat en Hoogvliet. Se suponía que se le entregaría un módem de Internet y salió con sus pantuflas de baño para recoger ese paquete. Según el repartidor, esto no estaba de acuerdo con las reglas de su empleador, PostNL, y se negó a entregar el paquete en la calle. Surgió entonces una discusión con fatal desenlace para el repartidor.
‘Miedo de perderlo todo’
El abogado del sospechoso pidió que lo liberaran por el momento en espera de la audiencia sustantiva de la demanda, en algún momento de este otoño. El hombre acaba de convertirse en padre de un niño de siete meses, acaba de conseguir una casa y un trabajo estable. “Me he metido en una pesadilla y tengo miedo de perderlo todo”. Sin embargo, el juez determina que el hombre debe permanecer en la cárcel por el momento. Anteriormente ha estado en contacto con la ley y, según el tribunal, también hay posibilidades de reincidencia.
El caso continuará el 4 de agosto.