Durante la víspera de Año Nuevo no hubo grandes disturbios en Drente. Así lo informó la policía esta mañana. Sin embargo, en Assen y Eelde reinaba la inquietud, donde agentes de policía y bomberos fueron arrojados con fuegos artificiales.
Según la policía, en Drente se han registrado incendios, molestias con fuegos artificiales y vandalismo. Cuatro personas han sido detenidas.
La policía estuvo presente en Eelde durante “algún tiempo”. En ese momento, los agentes fueron arrojados con fuegos artificiales. “Finalmente volvió la paz”, escribió la policía.
En la calle Schultestraat de Assen “la tarde y la noche estaban inquietas por los incendios en la calle”. Mientras apagaban el fuego, los bomberos fueron arrojados con fuegos artificiales. “Con el tiempo, también allí volvió la paz”.
Durante la víspera de Año Nuevo se realizaron en total catorce detenciones en el norte de los Países Bajos. Los mayores excesos se produjeron en Groningen, donde la policía antidisturbios tuvo que intervenir en Hoogkerk y Bedum. En Midwolda estallaron fuertes fuegos artificiales que causaron daños a viviendas. También se produjeron dos colisiones mortales en Oldehove y Oude Pekela y una persona fue apuñalada en la ciudad de Groningen.
Al igual que en Drente, en Frisia no se produjeron grandes disturbios, informó la policía.
En definitiva, la policía habla de una Nochevieja con “varios acontecimientos intensos” en el norte de los Países Bajos.