Varias ocasiones, dominio del juego pero ni siquiera gol. Amargo debut del Milán en la Liga de Campeones ante el Newcastle, el equipo al que Pioli pretendía dejar inmediatamente detrás de él en la clasificación. Al menos desde el punto de vista del juego y de la intensidad, el técnico ha encontrado signos de despertar (por Marco Pasotto)