Cada vez con más frecuencia, incluso en los supermercados italianos, se pueden encontrar plátanos rojosque no son más que una de las muchas variaciones de los más comunes plátanos amarillos con los que comparten el aporte calórico y el contenido de carbohidratos, así como muchas propiedades aunque existen algunas diferencias a partir del gusto. El plátano rojo, muy presente en los países del Sudeste Asiático y Centroamérica, contienen más pulpa y tienen un sabor más dulce en comparación con los plátanos amarillos, y también tienen un índice glucémico más bajo.