Poco antes del mediodía, se formó un rastro de pegamento en Kennedylaan, cerca de la intersección con Rijkswachtlaan en Zelzate. Un problema pegajoso que se extiende seis kilómetros también lo confirma el servicio de bomberos. Rápidamente llegó a la escena: el rastro de pegamento ahora se está eliminando lenta pero seguramente con un limpiador de alta presión.
Mientras tanto, la protección civil también ha llegado al lugar, principalmente para proteger a los bomberos del tráfico en la transitada vía. Actualmente, las molestias del tráfico son limitadas, pero debido a que eliminar el rastro de pegamento lleva bastante tiempo, la situación aún podría cambiar. Todavía no está claro cómo terminó el pegamento en la carretera.