Pilates durante el embarazo: 5 razones para moverse


lUn embarazo fisiológico, es decir, sin complicaciones, puede encontrar grandes beneficios con un entrenamiento ligero basado en Pilates, naturalmente con el consentimiento de tu ginecólogo y en función de tu nivel de ejercicio. El movimiento, en general, siempre es recomendable para favorecer la buena circulación, la correcta respiración y también el buen humor de la futura mamá y del bebé. Pero no solo.

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Pilates ofrece alivio a la espalda cansada por el peso del vientre y favorece una mejor circulación en los miembros inferiores, pero no sólo eso. Mónica Capuano, Educadora de Balanced Body® en Italia y segunda madre, nos contó cinco razones para convencer incluso a las futuras madres más perezosas de practicar Pilates. Para mejorar la experiencia del embarazo y también la del parto.

Embarazo y Pilates, una combinación ganadora

Es normal que el embarazo traiga cambios paulatinos en el cuerpo y la mente de la mujer, que el Pilates puede acompañar de forma suave y eficaz, mejorando el proceso. Un tipo de entrenamiento creado a principios del siglo XX que a lo largo de las décadas se ha ido ampliando y enriqueciendo con nuevas prácticas y conocimientos, siempre con el objetivo de promover el bienestar físico.

Es mejor empezar con Pilates antes del embarazo.

«Un cuerpo entrenado Cada evolución física la experimentaremos más fluidamente.incluso la que da el embarazo y, en consecuencia, se enfrentará a la recuperación posparto también es más fácil. Siempre que sea posible, es recomendable empezar a practicar Pilates mientras intentas quedar embarazada. Entonces será posible Reanuda tu entrenamiento a partir de la decimosexta semana. de gestación, obviamente sujeto a la autorización del médico de confianza», explica Monica Capuano, directora del Pilates Studio Napoli y educadora Balanced Body®, marca representada en Italia por la empresa Genesi.

Los 5 beneficios del Pilates durante el embarazo

1. Promueve la elasticidad muscular y el soporte de la zona lumbar.

«Allá relaxina, una hormona liberada durante el embarazo, permite que los ligamentos que conectan los huesos se vuelvan más flexibles. Esto, en conjunto con el aumento de peso del vientre, hace que la Mujer embarazada más propensa a sufrir dolor pélvico y lumbalgia.. A través de ejercicios específicos, como el gato o la vaca, con Pilates es posible fortalecer la banda abdominal, en beneficio del soporte lumbar y la postura. El resultado es la reducción o prevención del dolor de espalda. Además, los ejercicios seguros y sencillos, como las sentadillas y los lounges, reducen la carga sobre la pelvis y la zona lumbar”, afirma. Mónica Capuano.

2. Conciencia de tu cuerpo y tu respiración.

«Si originalmente jose pilates Llamó al método de entrenamiento que creó «Contrología», hay una razón, por supuesto. Pilates, con sus movimientos conscientes y medidos, permite a la mujer (incluso embarazada) adquirir mayor coordinación en el movimiento y uno profundo dominio de tu respiración, un elemento muy importante durante el parto. Regular correctamente la respiración ayuda a aliviar la sensación de dolor”, explica el experto.

3. Piernas más ligeras

«Las piernas pesadas son un problema muy común durante el embarazo. Pilates tiene la ventaja de revitalizar la circulación tanto venosa como linfática, combatiendo el estancamiento de líquidos en las extremidades. Press de piernas en silla y juego de pies (con apoyo) son dos ejercicios que, trabajando las piernas, Ayudan a la microcirculación y evitan los molestos tobillos hinchados.» añade el instructor.

4. Fortalece el suelo pélvico

«Entrenar la zona pélvica, especialmente con ejercicios como pliegues y sentadillas, con secuencias específicas realizadas de forma constante y correcta, puede aportar muchos beneficios frente a los problemas más comunes del embarazo y el posparto. Con sirena y giro en posición sentada, por ejemplo, el fortalecimiento de los músculos de la columna«, explica Mónica Capuano.

5. Apoya el equilibrio emocional y el bienestar mental.

«Cuando te enfrentas a tantos cambios es importante reservarte tiempo para ti mismo, para metabolizar la nueva condición. Pilates ayuda a las mujeres embarazadas, dándoles la oportunidad de dejar que la mente se ralentice. No sólo durante el entrenamiento, sí. Producen endorfinas responsables del buen humor. Las técnicas de relajación específicas del Pilates, basadas en el control y el conocimiento de la musculatura, favorecen una mayor sensación de bienestar general”, concluye el experto.

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