1/1 Seis camas, una pequeña cocina y una ducha, perfecto para los refugiados ucranianos, dice Peter Gilles.
Peter Gillis ofrece su parque de vacaciones Prinsenmeer en Asten para recibir refugiados de Ucrania. “Cuando vi esas imágenes desgarradoras en la televisión, sentí algo”, dice el empresario de Rijen. “No deberías querer eso, así que ayudemos a la gente”. En lo que a él respecta, los refugiados ya pueden ir a su parque mañana, pero la Región de Seguridad del Sudeste de Brabante no va a aceptar la oferta por el momento.
Se trata de chalets con capacidad para seis personas. Las cabañas están completamente equipadas con camas, cocina, ducha y WC.
La Región de Seguridad del Sudeste de Brabante, que decide dónde se alojarán los refugiados, anunció el viernes por la noche que ya se han encontrado suficientes lugares de recepción. “Los primeros mil refugios para refugiados ucranianos ya se han encontrado en nuestra región. Estos estarán disponibles rápidamente en fases para que podamos responder adecuadamente a una forma humana de recepción”.
‘Alternativa para el futuro’
“Actualmente no estamos utilizando la oferta, pero no sabemos qué nos deparará, por lo que el parque de vacaciones puede ser una alternativa en el futuro”, dijo un portavoz de la Región de Seguridad.
El parque de vacaciones está actualmente vacío. Durante años vivieron allí 400 trabajadores migrantes, pero esa vivienda era ilegal porque Gillis no tenía permiso para ello.
Multa de 50.000 euros al día
En 2019, el municipio de Asten anunció que los residentes, principalmente polacos, tenían que abandonar el parque de vacaciones de Prinsenmeer. De no ser así, se le impondría una sanción de 50.000 euros diarios, con un máximo de medio millón, para evitar que Gillis gane dinero con el alquiler de los chalés.
Una demanda llegó al Consejo de Estado, que también falló a favor del municipio. Finalmente, los últimos trabajadores migrantes partieron en abril del año pasado.
Como propietario del Grupo Oostappen, Gillis tiene ocho parques de vacaciones en los Países Bajos, incluidos Asten, Valkenswaard y Soerendonk. También tiene tres parques de vacaciones en Bélgica.
LEA TAMBIÉN:
El parque de vacaciones Oostapp tiene que pagar una multa de medio millón
Casi todos los trabajadores migrantes abandonaron el parque de vacaciones Peter Gillis