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Una persona murió y al menos 13 resultaron heridas en una serie de presuntos atropellos con vehículos ocurridos el lunes en la ciudad de Ra’anana, en el centro de Israel, que la policía describió como un «ataque terrorista».
Un portavoz de la policía dijo que se creía que un palestino de la ciudad de Hebrón, en la ocupada Cisjordania, «robó varios vehículos y los utilizó para atropellar a varios civiles» en una ciudad israelí a unos 20 kilómetros al norte de Tel Aviv.
Ha sido arrestado, junto con un segundo hombre a quien la policía describió como su pariente. El caso será investigado por la policía local en cooperación con la agencia de seguridad interna Shin Bet.
«Actualmente se cree que se trata de un evento de varias etapas en el que los sospechosos cambiaron entre tres vehículos», dijo la policía.
El servicio paramédico Magen David Adom de Israel atendió a 18 víctimas, una de las cuales se encontraba en estado crítico y dos en «estado grave con lesiones en la cabeza y las extremidades». Dijo que al menos una persona había sufrido heridas de arma blanca.
Posteriormente, los medios israelíes informaron que una mujer de unos 70 años había muerto a causa de sus heridas, citando al Hospital Meir en la cercana ciudad de Kfar Saba. El hospital no respondió a las solicitudes de comentarios.
El ataque tuvo lugar en medio de crecientes tensiones por la guerra de tres meses de Israel contra Hamás en Gaza. Hamás dijo que las presuntas embestidas eran una “respuesta natural a las masacres de la ocupación y su continua agresión contra nuestro pueblo palestino”, pero no llegó a reivindicar la responsabilidad.
La guerra, que comenzó cuando el grupo militante palestino irrumpió en Israel desde Gaza el año pasado, ya es la ronda de combates más sangrienta en el conflicto palestino-israelí desde la guerra que acompañó a la fundación del Estado judío en 1948.
Los militantes de Hamas mataron a unas 1.200 personas y tomaron como rehenes a otras 240 durante el ataque del 7 de octubre, según funcionarios israelíes.
El ataque de represalia de Israel contra Gaza ha matado a más de 24.000 personas, según funcionarios palestinos, además de desplazar a 1,9 millones de los 2,3 millones de habitantes del territorio y dejar inhabitables grandes extensiones del territorio.
El lunes, los jefes de tres agencias de la ONU dijeron que era “urgente un cambio fundamental” en el flujo de ayuda humanitaria, advirtiendo que había un riesgo creciente de hambruna en Gaza.
«Sin la capacidad de producir o importar alimentos, toda la población de Gaza depende de la ayuda para sobrevivir», dijeron las agencias, advirtiendo que las cantidades de ayuda que se entregan «están muy por debajo de lo que se necesita para prevenir una combinación mortal de hambre, desnutrición y enfermedad”.