Pánico en el partido: ¿podrán los demócratas todavía deshacerse de Biden?


Una desastrosa actuación en el debate del presidente Joe Biden, a más de cuatro meses de las elecciones, ha provocado un pánico generalizado en su Partido Demócrata. Durante meses, los demócratas mantuvieron sus filas más o menos cerradas: Biden cumplió sus promesas como presidente e hizo florecer al país después del coronavirus y el asalto al Capitolio. Se le concedió un nuevo enfrentamiento con Donald Trump. Se descartaron dudas sobre su edad (81) y su estado. Hasta esta desastrosa tarde de jueves.

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Frente a Trump, Biden buscó de manera incoherente sus propias propuestas políticas y las mentiras de su oponente. A veces se quedaba paralizado como si estuviera mirando a la muerte a los ojos. Cualesquiera que sean los puntos precisos que hizo sobre el aborto, los impuestos y la reciente condena de Trump, palidecieron ante el resplandor de su frágil cuerpo y su mente vacilante. El declive de Biden ya no es una caricatura que pintan los republicanos, es la realidad que todos pueden ver.

Los miembros del partido fuera de Washington están pidiendo en voz alta a Biden que se retire en las redes sociales y la televisión. Columnistas de periódicos como Los New York Times y El Correo de Washington instan en masa a Biden a que ceda paso. Los donantes se están moviendo.

Los demócratas que se presentarán a las elecciones de noviembre temen –de forma anónima– por su país y por su propio futuro. “El movimiento para convencer a Biden de que no sea candidato existe”, dijo uno de ellos a cambio de politico. “Estoy rezando de rodillas para que no sea demasiado tarde para reemplazarlo”, dijo otro El periodico de Wall Street.

Incluso la vicepresidenta Kamala Harris criticó negativamente a Biden. “El comienzo fue lento, eso lo tiene claro todo el mundo”.

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¿Podrán los demócratas todavía deshacerse de Biden?

Hasta que se impriman las papeletas, los demócratas en la mayoría de los estados pueden nominar a un candidato diferente. Incluso después de eso, si algo le sucede a Biden, el presidente del partido puede presentar un nuevo candidato en consulta con los gobernadores y miembros del Congreso. Pero Joe Biden ganó las primarias demócratas y debería ser declarado oficialmente candidato en agosto, cuando el partido celebre su convención en Chicago. Si las emociones y el análisis interno de que Trump le gana a Biden de esta forma siguen dominando, esa convención es el lugar para nombrar a otra persona. Porque la mayoría de los delegados que deberían votar por Biden allí también podrían, en teoría, tomar una decisión diferente.

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¿Qué tan probable es eso?

Es prácticamente inconcebible que los demócratas den un golpe de estado y que suficientes delegados rompan su lealtad a Biden y sus votantes. La única manera realista de emerger con un candidato diferente en noviembre es si se convence a Biden de retirarse. Los demócratas esperan que Chuck Schumer y Hakeem Jeffries, los líderes de su partido en el Senado y la Cámara de Representantes, presionen a Biden. Quieren que Nancy Pelosi, la predecesora de Jeffrie, convenza al testarudo Biden.

Pero en el partido parece que la única que realmente ejerce influencia sobre Joe Biden es su esposa Jill. Sólo si ella observara el debate con tanto horror como el resto de Estados Unidos, Biden podría conservar el honor para sí. Por el momento este no es el caso. El bando de Biden enfatiza que los presidentes en ejercicio a menudo tienen un desempeño inferior en su primer debate y que la campaña continuará durante mucho tiempo. “Creo que lo hicimos bien” Joe Biden dijo después. „Avancemos.”

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¿Quién podría reemplazar a Biden?

Esta pregunta expone otra dolorosa debilidad del Partido Demócrata. El Banco de la Reserva parece estar lleno de candidatos adecuados. Incluyendo a Gretchen Whitmer, la gobernadora de estados indecisos Michigan, Josh Shapiro, de Pensilvania, o el californiano Gavin Newsom son populares. Pero Kamala Harris no está en la lista de todos. Como vicepresidenta, es la sucesora lógica de Biden, pero es, si cabe, incluso menos popular que él entre los votantes. Su paso por la Casa Blanca no ha tenido éxito significativo. Hay dudas de que pueda vencer a Trump. Parece imposible que los demócratas también estén dejando de lado a Harris además de a Biden. El partido que valora la diversidad debería entonces decirle a una mujer negra que no es apta para ser presidenta.

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