Özcan Akyol no tiene ningún interés en los precios de la televisión de Televizier ahora que un tipo como André Hazes Jr. contrata gente para captar votos. “No quieres un precio así, ¿verdad?”
No debería volverse más loco: resulta que André Hazes Jr. contrata gente para conseguir votos para él. El cantante folk cree que merece el Anillo de Oro del Televizier. La organización ha anunciado que André no será descalificado, a pesar de su cuestionable forma de recoger los votos.
“No quieres un precio así”
Özcan Akyol también está en el Larga lista de Televizier, pero realmente no tiene ningún interés en ese precio. “Para ser honesto: ¡no! Porque hay que rogar por votos. De hecho, me nominaron a mejor presentador (está en la lista de 50 personas, ed.), pero ahora ves gente en las redes sociales pidiendo votos”, dice en adentro hoy.
Continúa: “Pero no voy a decir en mi Instagram o Facebook: ‘¡Chicos, todos voten por mí!’ André Hazes había contratado chicas y todas recibieron una tableta en un festival durante una actuación y luego tuvieron que votar por él en el Televizier. Sí, ¡¿no querrás ganar un premio así si la gente lo trata así?!
Fred Oster
A Wilfred Genee le resulta extraño que André pueda seguir participando. “Fred Oster parece haberlo ganado así una vez y luego no fue otorgado, ¿verdad?”
Johan Derksen: “Sí, mira, una política activa ayuda. Si tiene un programa en ejecución, puede hacerlo en su programa”.
Özcan: “Eso no está permitido en la ONG”.
panel de llamada
Todo es muy manipulador, dice Özcan. “Sé – y no diré qué programa, porque entonces habrá un gran revuelo – que VARA convocó a un panel completo de llamadas de todo tipo de personas de una agencia de empleo en ese momento. Todos llamaron y así ganaron ese Televizier”.
¿Se trata de tachuelas? “No digo nada más, de lo contrario me cancelarán. Yo sé que sí.”
¡Es Paul de Leeuw!
La susurradora de Mediapark, Tina Nijkamp, tiene una idea de a quién se refiere Özcan aquí. Escribe en su canal de análisis: “Todo en VI indicaba que sería Beautiful Weather De Leeuw de Paul de Leeuw, de 2008”.
Ella concluye: “Me pregunto si realmente se trataba de ese programa…”