Por cuarta vez en un mes, cientos de miles de franceses protestan en decenas de ciudades contra las reformas de pensiones anunciadas por el presidente Emmanuel Macron. Eso informan los medios franceses Sábado. Estas reformas incluyen elevar la edad de jubilación de 62 a 64 años en 2030.
Las protestas están provocando vuelos retrasados y cancelados desde París. El aeropuerto de Orly advierte sobre interrupciones porque varios empleados de la autoridad de aviación francesa, también responsable del control del tráfico aéreo, están en huelga. Según el canal de noticias francés BFMTV esto afecta al 50 por ciento de todos los vuelos.
Además del aumento de edad, las reformas también suponen que el periodo en el que los franceses deberán cotizar para el devengo de su pensión se ampliará hasta un máximo de 43 años. Por otro lado, la pensión mínima de algunos franceses está subiendo. Según Macron, la reforma es “vital” para la viabilidad del sistema de pensiones. La primera ministra Élisabeth Borne también dijo anteriormente que la reforma “ya no es un punto de discusión”.
En la primera manifestación el 19 de enero, 80.000 manifestantes estaban de pie en París. Había 1,1 millones en todo el país. Según estimaciones, la segunda vez hubo unos 87.000 manifestantes en la capital francesa y 1,27 millones en todo el país. Todavía no está claro exactamente cuántos manifestantes salieron a las calles el sábado. Está claro, sin embargo, que cada vez más franceses se están volviendo contra las reformas. Las encuestas a fines de enero mostraron que el 72 por ciento está en contra, mientras que a mediados de enero todavía era el 40 por ciento.
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