Desde BZ
Ahora Oranienburg se está poniendo serio. Para ahorrar gas y electricidad durante la crisis energética, por el momento no hay agua caliente en la administración de la ciudad ni en las propiedades de la ciudad.
El alcalde Alexander Laesicke (43, independiente) puso en vigor estas y otras medidas el lunes. La ciudad anunció que todas las oficinas habían trabajado juntas sobre la base de propuestas de la Asociación Alemana de Ciudades y habían preparado un catálogo de medidas.
“Cada kilovatio hora que no se consume ahora asegura mayores niveles de llenado en los tanques de almacenamiento de gas. Todos podemos contribuir a esto”, dijo el alcalde.
La temperatura ambiente en pasillos y escaleras, pero también en las oficinas, ahora se reduce a 20 grados centígrados. Esto también se aplica a las escuelas de la ciudad. Los gimnasios no deben tener más de 17 grados de temperatura. Las guarderías están excluidas del ahorro.
Y en Berlín también hay diferentes consideraciones para ahorrar energía. En consecuencia, según la concejala de distrito Angelika Schöttler (59, SPD), Tempelhof-Schöneberg también tiene el ojo puesto en apagar la calefacción de agua caliente en las escuelas. En Steglitz-Zehlendorf se está trabajando para optimizar el suministro de calor y agua caliente.
Los distritos no pudieron ser contactados ayer con poca antelación para una declaración detallada sobre las medidas previstas.