Omtzigt, que se encuentra en vísperas de una conversación con el ganador de las elecciones, el PVV, sobre un posible gobierno conjunto, subrayó que su partido insistió en el respeto de la Constitución «antes, durante y después de la campaña electoral». ‘Somos coherentes y nos atenemos a esto. Ésta es la razón de ser de nuestro partido.’
El líder del NSC dijo que escuchó a su colega Wilders prometer varias veces durante el debate parlamentario del miércoles que «retiraría las propuestas contrarias a la Constitución» en nombre del PVV.
Omtzigt quiere mantener conversaciones con Wilders y también con Dilan Yesilgöz (VVD) y Caroline van der Plas (BBB) en las próximas semanas para ver si todos quieren decir lo mismo con «respeto a la Constitución». También espera descubrir si existe suficiente «confianza» mutua para trabajar juntos.
Enmienda de la Constitución
Omtzigt niega que sea fácil para los partidos adaptar la Constitución a su propio color político: «Rechazo firmemente la idea de que se pueda cambiar todo». Pero cuando los parlamentarios le preguntan si nunca aceptará una enmienda a la Constitución, su respuesta es: «No descarto todos los cambios en el orden jurídico internacional».
En este contexto, Omtzigt señala a todo tipo de partidos de izquierda a derecha que han hecho propuestas para modificar los tratados internacionales o la Constitución. Por ejemplo, el PVV propuso anteriormente la abolición del Senado, y GroenLinks-PvdA propuso la abolición de la familia real en el manifiesto electoral del verano pasado.
Durante el gobierno de Rutte II, el PvdA también acordó adaptar las normas que permiten retirar la segunda nacionalidad a las personas condenadas por terrorismo.
«No estoy fundamentalmente en contra de un debate sobre la modificación de las reglas», afirma Omtzigt. «Pero mientras no se modifiquen los tratados, nos adheriremos al ordenamiento jurídico tal como se aplica actualmente».