Un total de 140 personas, residentes de los municipios de Ronse, Kruisem, Kortemark, Ostend y Stabroek, se hicieron la prueba en el estudio de vzw Climaxi. Tres cuartas partes de ellos tienen niveles de PFA en la sangre que representan un riesgo para la salud. Esto quiere decir que los valores están por encima del límite sanitario fijado por Europa de 6,9 microgramos por litro. En once de ellos, los valores superaban incluso los 100 microgramos por litro.
“Eso es preocupante, porque a partir de 100 microgramos por litro puede haber efectos reales sobre el sistema inmunológico”, dice el profesor de toxicología Jacob de Boer (Universidad VU de Ámsterdam), quien ayudó a analizar los resultados. “Ese es el efecto secundario de pfas que más preocupa a los científicos”.
Incluso los niveles más altos de PFAS en la sangre pueden interferir con el embarazo, aumentar el colesterol, acelerar o ralentizar la función tiroidea o incluso causar cáncer de riñón y testicular. Las personas que viven cerca de industrias o vertederos donde hay mucha contaminación de pfas suelen tener los valores más altos en sangre, sobre todo si además comen huevos y verduras de su propia huerta o usan agua de pozo para beber o cocinar.
Problema-Ronse
También hay diferencias por municipio. “El mayor problema está realmente en Ronse”, dice de Boer. “Ya se han encontrado altas concentraciones en el suelo allí. Pero ahora vemos que la mediana de los valores de pfas es de 76 microgramos por litro, con picos de hasta 351 microgramos por litro. Eso está muy por encima de la norma”.
En Ronse también fueron testeados ocho trabajadores que laboran en dos fábricas textiles, Associated Beavers y Utexbel. Siete de ellos mostraron valores demasiado altos en su sangre. En Kruisem, Kortemark y Ostende, la mediana entre los residentes evaluados también es demasiado alta. En Kruisem, incluso se encontraron valores hasta ciento veinte veces mayores que el estándar europeo en dos personas.
Es la primera vez que grupos de personas fuera de Amberes también se someten a pruebas de niveles de pfas en la sangre en un estudio. Después de todo, el gobierno flamenco actualmente solo organiza un análisis de sangre a gran escala en el área alrededor de la fábrica de 3M en Zwijndrecht. Puedes hacerte una prueba individual en el médico, pero cuesta entre 60 y 200 euros.
Por lo tanto, Climaxi exige que la Agencia para el Cuidado y la Salud extienda esa investigación a todas las demás zonas de no arrepentimiento. Estas son zonas donde los residentes ya deben tomar precauciones adicionales para tratar de limitar la exposición a pfas. La organización climática quiere que tales proyecciones sean reembolsadas o gratuitas. Además, exige que el gobierno comunique mejores medidas de no arrepentimiento y acelere la remediación de sitios contaminados.
“Ya sabíamos que pfas se distribuye ampliamente en Flandes”, dice Filip De Bodt de vzw Climaxi. “Pero nos parece muy alarmante que encontremos valores atípicos de 300 a 800 microgramos por litro en la sangre. Sobre todo si comparamos los resultados con la lentitud con la que actúan varios gobiernos. Esto es un envenenamiento subsidiado de la población”.