Núcleo de gabinete federal acuerda reforma de pensiones, también avances en reforma tributaria

Los máximos ministros acordaron el tope de la perequation, un sistema por el cual las pensiones de los funcionarios aumentan -por encima del índice- con los salarios de los funcionarios. A partir de ahora, este incremento se limitará a un máximo del 0,3 por ciento anual del total de la pensión de los funcionarios. Los liberales querían abolir por completo el sistema de pensiones, pero eso era ir demasiado lejos para la ministra de Pensiones, Karine Lalieux (PS).

Además, la tasa de la contribución ‘Wijninckx’ -la contribución especial a la seguridad social sobre las pensiones complementarias- se incrementará del 3 al 6 por ciento. Lalieux enfatiza en un comunicado de prensa que las pensiones más altas, por lo tanto, contribuirán más. “Se ha fortalecido la solidaridad entre altas y bajas pensiones”. La medida solo entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2028.

Bono de pensión

El bono de pensión en la reforma del pasado verano se pagará neto y no bruto. Aquellos que trabajan más tiempo pueden optar por que se les pague la bonificación de una sola vez. Este pago único puede ascender a 22.645 euros para quienes opten por trabajar tres años más. Para personas con una carrera muy larga, esta cantidad excepcionalmente puede ser aún mayor.

Además, se requerirá una carrera efectiva de 20 años para acceder a la pensión mínima, según lo pactado previamente. Para tener en cuenta las diferencias de carrera entre hombres y mujeres, se tienen en cuenta algunos periodos asimilados, como el permiso de maternidad, el permiso de paternidad o el paro temporal.

Todas las medidas tomadas en conjunto reducirán el costo del envejecimiento en Bélgica en un 0,5 por ciento del PIB para 2070, todavía se dice. A las 11 horas el Gobierno explicará el acuerdo en rueda de prensa.

Impuesto de crisis

Al margen de las conversaciones, los principales ministros también acordaron abolir la Contribución Especial a la Seguridad Social (BBSZ), un impuesto de crisis que se introdujo en la década de 1990 bajo el mandato del Primer Ministro Jean-Luc Dehaene (cd&v). La abolición del BBSZ asegura que a los empleados les quede más salario neto al final del mes.