Los habitantes de Norgervaart han tenido que esperar años para conseguirlo, pero por fin hay planes concretos para abordar la carretera provincial. Es una satisfacción que a su paso también se esté abordando el puente de Norger. “Y ahora comencemos”.
Como diputado, Henk Jumelet sólo tiene en su cartera la “movilidad” desde hace poco más de un año, pero entiende el mal humor de los aproximadamente sesenta asistentes. “Al parecer tomó mucho tiempo”, suspira. “Últimamente hemos tenido que buscar mucho tiempo, pero ahora como provincia decimos: esto es lo que vamos a hacer”.
Porque, según el conductor, “un trato es un trato”. Y los residentes de Bovensmilde y Huis ter Heide están más que felices de que la provincia cumpla con ese acuerdo. “Está empezando a convertirse en una telenovela”, afirma Alex Prins. Vive a lo largo del Norgervaart, que debería ser mucho más seguro. “Es una carretera muy transitada donde la gente todavía conduce rápido”.
La provincia había planeado varias veces iniciar la remodelación, pero siempre surgía algo. Nitrógeno, aumento de los costos de construcción: estos temas se discutieron sucesivamente. Mientras tanto, se discutió sobre la velocidad máxima de la vía. A principios de 2023 se llegó a un compromiso: dos grandes partes pasarán a ser 60, el resto seguirá siendo 80.
Este acuerdo no cambiará, incluso si el público vuelve a expresar el deseo de que todo el Norgervaart alcance una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora. Además, la idea de colocar una reserva central en el puente Koelen sigue siendo válida. “Esto significa que estamos moviendo un poco el puente”, afirma en nombre de la provincia el experto en tráfico Foppe Koen.
Por lo tanto, dicho puente deberá eliminarse temporalmente. También habrá un puente para bicicletas. Si se reemplaza el puente Norger, no se construirá temporalmente un puente de emergencia. Esto tiene poco sentido, dice Koen, porque mientras tanto se está abordando el Norgervaart.
Ambos proyectos multimillonarios (el Norgervaart se estima en 12 millones de euros y el Norgerbrug en 16 millones de euros) se combinan para limitar las molestias. Los residentes y las empresas ubicadas en Norgervaart deben permanecer accesibles.
“Este otoño mantendremos conversaciones individuales con los habitantes de Norgerbrug”, afirma Koen. “Y si es necesario, también lo hacemos con los residentes de Norgervaart”.
Con toda probabilidad, la carretera provincial entre Bovensmilde y Huis ter Heide estará cerrada durante más de seis meses a partir de septiembre de 2025. Resident Prins lo llama un “mal necesario”. También ve en ello una ventaja. “Entonces todo estará tranquilo durante al menos seis meses”.
Los planes de la provincia aún deben ser aprobados por el Consejo Provincial. El diputado Jumelet tiene confianza en ello. “Creo que la Diputación está de acuerdo conmigo en que es un buen plan”, afirma.
La remodelación estará en la agenda provincial en octubre y se deberá tomar una decisión un mes después.