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Nokia dijo que recortaría hasta 14.000 puestos de trabajo como parte de un programa de reducción de costos a medida que los clientes del fabricante finlandés de equipos de telecomunicaciones reducen el gasto.
El grupo dijo el jueves que apuntaba a recortes de costos de hasta 1.200 millones de euros para 2026, mientras presentaba planes para reducir su fuerza laboral a entre 72.000 y 76.000, frente a los 86.000 que emplea actualmente.
Una combinación de tasas de interés más altas y un crecimiento global más lento llevaron a sus clientes a reducir sus gastos, dijo Nokia. Las ventas del grupo en el tercer trimestre cayeron una quinta parte, hasta los 5.000 millones de euros.
La medida de eliminar costos del negocio sigue a una advertencia sobre ganancias este mes del rival sueco Ericsson, que anunció que profundizaría sus propios planes de reestructuración.
Ambas compañías esperaban que la reciente introducción de las redes 5G aumentara las ventas y las ganancias, pero, aparte de algunos de los primeros usuarios, la tecnología no ha demostrado ser el catalizador que los operadores escandinavos necesitan.
“Las decisiones comerciales más difíciles de tomar son las que impactan a nuestra gente. Contamos con empleados inmensamente talentosos en Nokia y apoyaremos a todos los que se vean afectados por este proceso”, dijo Pekka Lundmark, director ejecutivo de Nokia.
«Reestablecer la base de costos es un paso necesario para ajustarnos a la incertidumbre del mercado y asegurar nuestra rentabilidad y competitividad a largo plazo», añadió.
El margen operativo subyacente de Nokia disminuyó 2 puntos porcentuales hasta el 8,5 por ciento en el trimestre, lo que llevó a la compañía a retrasar hasta 2026 su fecha límite para alcanzar un margen operativo del 14 por ciento.
Reiteró sus perspectivas para el año, que ya había recortado en julio. Es probable que las ventas se sitúen en el extremo inferior de su previsión de 23.200-24.600 millones de euros, mientras que su margen operativo subyacente estaría en el punto medio de su rango de 11,5-13 por ciento.
A pesar de la caída en las ventas del tercer trimestre, Nokia dijo que debería ver «una mejora estacional más normal en nuestro negocio de redes en el cuarto trimestre».
Además de los recortes de costos, Nokia dijo que también daría a sus negocios individuales una mayor «autonomía operativa», así como «simplificaría nuestro modelo operativo».
Esta semana, Ericsson se negó a dar ninguna orientación para el próximo año, señalando dudas sobre la fortaleza de la demanda de equipos de telecomunicaciones.
El grupo sueco también anunció un cargo por deterioro de 2.900 millones de dólares (equivalente a la mitad del precio de adquisición) por la compra de Vonage, el acuerdo emblemático de su director ejecutivo, Borje Ekholm.
El jefe de Ericsson está bajo presión después de que las revelaciones de que el grupo podría haber pagado al grupo terrorista ISIS en Irak provocaron la acción de los reguladores estadounidenses y una gran venta de acciones.