El estado de Florida responsabilizó a McDonald’s por daños físicos y mentales. Los padres habían exigido 15 millones, pero antes dijeron que “en realidad no tienen expectativas”.
En 2019, la niña de entonces cuatro años pasó por el McDrive de Tamarac junto a su madre y su hermano. Estaba sentada en el asiento trasero comiendo sus nuggets de pollo cuando de repente uno se interpuso entre su cinturón de seguridad y su piel. Eso provocó quemaduras graves y fuertes gritos. Las fotos de las quemaduras y una grabación de los gritos sirvieron como prueba en el caso. Además de la compensación, la niña también tiene una cicatriz del incidente.
Según McDonald’s, la cantidad de $ 800,000 era un poco grande, la propia empresa pensó en una compensación de no más de $ 156,000. Por ejemplo, la empresa afirma que no se siente responsable de lo que los clientes hagan con los productos y también afirma que la comida debe estar lo suficientemente caliente para prevenir infecciones por salmonella.