Al inicio de la negociación colectiva en la cadena de grandes almacenes Galeria Karstadt Kaufhof (GKK), el sindicato Verdi rechazó enfáticamente una propuesta de la empresa.
“Quien quiera sacar adelante un acuerdo barato al galope ignora la tensa situación financiera de la gente y sus familias en la Galeria”, afirmó Silke Zimmer, miembro de la junta directiva de Verdi, después de las conversaciones en Düsseldorf.
La empresa desperdicia la oportunidad de avanzar hacia el futuro con especialistas bien formados y motivados. “Los planes presentados para el llamado convenio colectivo de grandes almacenes no son un concepto de futuro viable para la cadena de grandes almacenes, que se encuentra en su tercer procedimiento de insolvencia, sino más bien un mero programa de reducción de costes a expensas de los empleados”, se queja Zimmer.
La crisis provoca peores salarios
El último gran grupo de grandes almacenes de Alemania lleva años en crisis y desde hace tiempo los empleados no cobran según el convenio colectivo del comercio minorista. Verdi esperaba que después de la reestructuración la empresa volviera a pagar según el convenio colectivo y que los empleados recibieran más dinero.
Sin embargo, Galeria rechazó esta esperanza: la empresa quiere tener su propio convenio colectivo que sólo se aplique a ella misma. Tendrá una duración de tres años e incluirá un aumento salarial del ocho por ciento, así como una bonificación única de compensación por inflación de 600 euros y una bonificación no especificada con la que los empleados deberían participar en el éxito de su respectiva rama.
El procedimiento de insolvencia, actualmente en curso, se levantará a finales de julio. La sociedad de inversión estadounidense NRDC y una sociedad de inversión del empresario Bernd Beetz pasarán a ser nuevos propietarios el 1 de agosto. Se espera que en septiembre el número de sucursales disminuya de las 92 actuales a 83, que seguirán contando con unos 12.000 empleados.
Convenio colectivo zonal tiene salarios más altos
Según Verdi, Karstadt ya no paga según el convenio colectivo desde 2004 y más tarde la empresa se fusionó con el grupo de grandes almacenes Galeria Karstadt Kaufhof. Según información del sindicato, GKK, a su vez, desde 2019 ya no paga a toda la empresa según el convenio colectivo. Desde el punto de vista de Verdi, esto no fue en modo alguno una salida del convenio colectivo, sino más bien una desvinculación temporal del mismo.
Según el sindicato, los empleados de GKK reciben actualmente una media de 9.000 euros menos al año que sus compañeros de otros minoristas que pagan según un convenio colectivo. Según Verdi, esta diferencia se solucionaría permanentemente si se aceptara e implementara la actual oferta tarifaria de Galeria. “Esto es completamente inaceptable”, afirmó el negociador de Verdi, Marcel Schäuble, describiendo la propuesta de Galeria como una “afrenta a los empleados que trabajan duro por el futuro de su empresa”.
Aún no está claro cuándo el sindicato se reunirá nuevamente con los representantes de la empresa para negociar el convenio colectivo. (dpa)