En Flandes, según cifras de Natuurpunt, hay un potencial de 147.000 hectáreas de humedales que se pueden restaurar. De esas tierras, poco menos de 50.000 hectáreas se encuentran en un destino verde. Natuurpunt es responsable de casi 1.500 hectáreas de éstas. La organización ha seleccionado dieciocho reservas naturales repartidas por Flandes, que serán restauradas.
En Flandes Occidental se trata del pólder Uitkerkse en Blankenberge y de las murallas de Damme.
Tres de las zonas seleccionadas se encuentran en la región de Dender, que recientemente sufrió inundaciones. Se trata, por ejemplo, del Markvallei, en la frontera entre Galmaarden y Geraardsbergen, en Flandes Oriental. Además del Markvallei, en Flandes Oriental se están renovando el Sint-Onolfspolder y el Hogedonk. Para Amberes se han elegido las zonas de Rivierenland, Krabbels-Lovenhoek, Visbeekvallei, De Maat-Den Diel, Vallei van de Maasloop, Breeven y De Vennen. En Limburgo se están abordando De Maten, el valle de Abeek, el valle de Dommel y el valle de Hageven, y en el Brabante Flamenco, también se está abordando el valle de Zuun y el valle de Grote Gete.
El Plan de Humedales cuesta 30 millones de euros. La financiación proviene de la Unión Europea a través de Interreg Blue Transition y LIFE Wetlands4Cities, y de Flandes a través del Blue Deal. La propia Natuurpunt invierte 4,5 millones de euros.