A principios de esta semana, el republicano Trump intentó revocar su suspensión permanente en Twitter a través de una apelación. A Trump se le prohibió el acceso a las redes sociales después de que sus partidarios irrumpieran en el Capitolio el 6 de enero de 2021. Desde su adquisición, Musk ya ha restaurado varias cuentas de usuarios controvertidas.
Alrededor de las 4 a.m., hora de Bélgica, 3,6 millones de usuarios de Twitter ya habían emitido su voto en la encuesta que Musk puso en línea a través de su propia cuenta de Twitter. En ese momento, parecía haber una mayoría a favor del regreso de Trump. La encuesta se extenderá hasta el domingo a las dos menos cuarto de la noche, hora belga.
“Vox Populi, Vox Dei”, tuiteó Musk durante la votación, en latín “La voz del pueblo es la voz de Dios”. Con esto quiere dejar claro que la opinión de los usuarios es determinante para la decisión de dejar o no volver a Trump.
Twitter dijo el año pasado que retiró a Trump de la plataforma “debido al riesgo de una mayor incitación a la violencia” después de que sus partidarios irrumpieran en el parlamento estadounidense. Intentaron evitar que se ratificaran los resultados de las elecciones presidenciales, que ganó Joe Biden. En mayo de este año, un juez de San Francisco rechazó la afirmación de sus abogados de que la prohibición violaba la libertad de expresión.
Trump tenía más de ochenta millones de seguidores en Twitter. En su copia de Twitter, Truth Social, solo hay unos pocos millones y esa plataforma también está luchando con problemas financieros.
Crisis
Mientras tanto, la crisis en Twitter parece haber alcanzado un nuevo nivel. Las oficinas de la empresa permanecerán cerradas por un motivo que se desconoce. A muchos empleados les gustaría irse porque Musk quiere que firmen una promesa de que tienen que trabajar duro. Al mismo tiempo, la plataforma sufre problemas de estabilidad, pero no habría personal suficiente para lidiar con errores y otros problemas.