Los agentes de policía encontraron el cuerpo de la bebé recién nacida el domingo por la noche en una casa en el municipio de Stains, donde la sospechosa de 21 años vivía con sus padres. El cadáver había sido cortado en pedazos. Los oficiales también encontraron ropa ensangrentada en la casa. Según los primeros datos, la mujer de 21 años es la madre del niño. Ella pudo haber matado al bebé justo después de dar a luz.
La joven ha sido arrestada bajo sospecha de homicidio involuntario. Se ha iniciado una investigación sobre las circunstancias exactas del drama. Aún no está claro si se trata de la negación del embarazo, informa el Ministerio Público.
Fueron unos amigos del sospechoso quienes habían informado a la policía. Según ellos, la joven los llamó para decirles que acababa de dar a luz a “un niño que nació muerto”. Por teléfono también amenazó con cortar al bebé en pedazos.