El tribunal de Stoke-on-Trent condenó a la mujer de 44 años a 28 meses de prisión el lunes, la mitad de los cuales fueron suspendidos. La mujer tomó pastillas abortivas en su casa en mayo de 2020 y luego llamó al 911 para decir que había abortado. En el hospital resultó que la mujer tenía más de treinta semanas de embarazo en el momento del aborto. Debido a que el aborto está permitido en Inglaterra hasta las 24 semanas, llamaron a la policía.
El Parlamento británico ha reaccionado conmocionado ante el veredicto. La diputada laborista Stella Creasy calificó la legislación como “una resaca de otra era” y pidió una reforma. Caroline Nokes de los conservadores quiere “revisar de nuevo” la legislación “muy obsoleta”. La organización de derechos humanos Amnistía Internacional también desaprueba la condena. “Es impactante y aterrador que una mujer sea encarcelada en el Reino Unido en 2023 por una ley que data de 1861”, dijo Chiara Capraro de Amnistía del Reino Unido.
El veredicto se basa en la Ley de Violaciones contra la Persona de 1861, que cubre todo tipo de delitos violentos como asesinato, homicidio involuntario y violación. Los artículos de ley relacionados con el aborto se eliminaron de la ley en Irlanda del Norte en 2019, pero todavía están vigentes en Inglaterra, Escocia y Gales.
‘Conmocionado y horrorizado’
Los fiscales dicen que la mujer engañó deliberadamente al Servicio Británico de Asesoramiento sobre el Embarazo (BPAS), la organización que proporciona píldoras abortivas, mintiendo sobre la duración de su embarazo. La mujer recibió las píldoras abortivas según un procedimiento introducido durante la pandemia de la corona. Desde entonces, las mujeres pueden recibir pastillas después de una consulta telefónica para interrumpir embarazos no deseados hasta por diez semanas.
La mujer descubrió que estaba embarazada a fines de 2019, pero tenía miedo de ir al médico. Por eso decidió utilizar el nuevo procedimiento telefónico. Durante un interrogatorio policial, la mujer admitió que había mentido sobre la duración de su embarazo. Los fiscales dijeron que realizó búsquedas en Internet preguntando “Necesito un aborto, pero tengo más de 24 semanas” y “¿Me pueden encarcelar por un aborto a las 30 semanas?”
El director de BPAS, Clare Murphy, dice que está “conmocionado y horrorizado” por el veredicto. “El juez ha dejado claro que las mujeres solo están protegidas de ser procesadas si el parlamento cambia la ley”, dijo Murphy. Un grupo de organizaciones, incluidos ginecólogos y obstetras, advirtieron al juez la primavera pasada que “este caso podría enviar una señal de que las mujeres que buscan acceder a un aborto corren el riesgo de ir a prisión”. Mandu Reid, líder del partido feminista Women’s Equality Party, señala las consecuencias para los tres hijos de la mujer. “Este veredicto no sirve a nadie, ni a ella, ni a sus hijos, ni al interés público”.