El incidente que rodeó el abuso en la prisión de Colonna provocó días de disturbios en toda la isla en el Mediterráneo. Decenas de policías y manifestantes resultaron heridos. Los manifestantes estaban enojados porque las autoridades francesas no lo habían trasladado a una prisión en Córcega en contra de su pedido.
La justicia francesa había suspendido previamente la cadena perpetua que cumplía por el asesinato del gobernador de Córcega en 1998 por motivos médicos.