Monza y la Rossa, una historia de amor centenaria


El circuito de Brianza nació en 1922, el primer éxito de Ferrari llegó en el 49 con Ascari, que luego perdió la vida allí. De Regazzoni a Scheckter, de Barrichello a Schumi, hasta el triunfo final de Leclerc

La primera vez fue en 1949. Fue necesario dar 80 vueltas, 504 kilómetros. Se fueron 24, llegaron 9. Al principio, el joven Ascari se había mojado la gorra para mantenerse fresco, luego se subió a su Ferrari creado apenas dos años antes y se dirigió hacia la historia. Tomó el mando, nadie podía alcanzarlo. Tras la meta lo cogieron en hombros, lo llevaron bajo la tribuna y le pusieron en la mano un ramo de claveles rojos. El Corriere della Sera escribió que «nadie podía cuestionar su clase» y que «lo único que se podía cuestionar era la resistencia de sus medios mecánicos».



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