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Monte dei Paschi di Siena, el prestamista que estuvo en el centro de una crisis en los bancos italianos la década pasada, pagará su primer dividendo desde 2010, culminando un cambio de rumbo para el banco respaldado por el Estado.
MPS, que fue rescatada por el gobierno italiano en 2017, dijo el miércoles que pagaría 315 millones de euros a los accionistas, reiniciando los dividendos dos años antes de lo previsto. Volvió a obtener beneficios para todo el año con ganancias récord de poco más de 2.000 millones de euros, tras una pérdida de 178 millones de euros en 2022.
El beneficio neto se disparó a 1.120 millones de euros en el último trimestre del año, una cifra que se acerca a la previsión de beneficios del banco para el año. El director ejecutivo, Luigi Lovaglio, había estimado anteriormente que los beneficios anuales rondarían los 1.100 millones de euros.
El aumento de los beneficios se debió a la liberación de 466 millones de euros que MPS había reservado para cubrir riesgos legales, tras una serie de sentencias judiciales. A finales del año pasado, la antigua alta dirección de MPS fue absuelta en un caso financiero de alto perfil, revirtiendo condenas anteriores por manipulación del mercado y contabilidad falsa.
El cambio se produce tras un controvertido aumento de capital en noviembre de 2022, que se vio obligado al banco después del colapso de una fusión con UniCredit, con sede en Milán.
El gobierno italiano redujo su participación en MPS en noviembre, vendiendo una participación del 25 por ciento en el mercado. La venta, que redujo la participación del Estado en el banco al 39 por ciento, se produjo mientras el prestamista se prepara para volver a la propiedad privada este año.
El prestamista deberá ser privatizado a finales de 2024, según un acuerdo entre Italia y la Comisión Europea, que dio luz verde al rescate a finales de 2017.
«El banco ha recorrido un largo camino en su proceso de normalización», dijo Azzurra Guelfi, analista de Citigroup, quien destacó la mejora de la rentabilidad del banco «y también una mayor diversificación de los accionistas».
Los beneficios del banco se vieron impulsados por una reestructuración implementada por Lovaglio. MPS dijo que había recortado los costos de personal en un 15 por ciento durante el año, ya que recogió los beneficios de su plan de despido voluntario, mientras que los costos administrativos cayeron un 7,5 por ciento.
Los ingresos, incluidas las comisiones netas, también se fortalecieron en el cuarto trimestre, dijo el prestamista. Los ingresos netos por intereses del banco para el año aumentaron un 49 por ciento desde 2022, a 2.300 millones de euros, impulsados por el aumento de las tasas de interés del banco central.