Cuando el reloj dio la medianoche en Amberes, las cosas se pusieron más inquietas en algunos lugares de Amberes. También en la esquina de Lakborslei y Jos Scheurweghstraat en Deurne. Allí, algunos jóvenes comenzaron a lanzar bengalas, algunas de las cuales iban dirigidas a las casas aledañas. Al final, la policía tuvo que dispersar a los enloquecidos.
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