Mikhail Gorbachev, cuyo impulso para transformar la Unión Soviética puso fin a la Guerra Fría pero sin darse cuenta ayudó a provocar el colapso de su propio país, murió, según las agencias de noticias rusas. Tenía 91 años. Las agencias Tass, RIA Novosti e Interfax citaron al Hospital Clínico Central, según Associated Press.
El reinado de Gorbachov como el último primer ministro soviético desde 1985 hasta 1991 estuvo marcado indeleblemente por dos lemas: perestroika —literalmente “reestructuración”, pero que implica reforma— y glasnost, o “apertura”, símbolos de su intención de sacudirse el letargo causado por siete décadas. de gobierno autoritario y planificación central seria. Con la esperanza de devolver al Partido Comunista a sus raíces en la Revolución de Octubre de Vladimir Lenin de 1917, Gorbachov abrió el sistema político soviético a una participación política más amplia, al escrutinio público y a un nuevo examen del legado de asesinatos y encarcelamientos masivos de Josef Stalin, lo que provocó años de examen de conciencia nacional.