A principios de enero, Microsoft se convirtió en el último gigante en anunciar una ola de despidos que afectó a 10.000 personas. Este viernes 10 de febrero, la firma de Redmond detalló que más de 600 recortes de empleo afectarán a sus divisiones Hololens, Xbox o incluso GitHub. Una decisión que podría poner en entredicho el desarrollo de la nueva generación de gafas de realidad mixta Hololens.
Microsoft quiere tranquilizar a toda costa
Anunciado originalmente el jueves pasado por BloombergMicrosoft confirmó al día siguiente los recortes de empleo en sus divisiones Hololens, Xbox y GitHub. En su declaración, Microsoft no reveló la cantidad de puestos de trabajo eliminados, pero una Notificación de ajuste y readiestramiento de trabajadores (WARN) emitida por el estado de Washington señala 617 despidos en Redmond, Bellevue e Issaquah. Tantos bastiones de Microsoft.
Dentro de la unidad de juegos de Xbox, las reducciones de personal afectaron principalmente al marketing. El jefe de división, Phil Spencer, envió un correo electrónico a sus empleados para informarles y tranquilizarlos: “ Animo a cada uno de ustedes a tomarse el tiempo y el espacio para procesar la información y apoyar a sus colegas. “.
Por el lado de HoloLens, la mayor eliminación de gran parte del equipo de hardware pone en duda la producción de una tercera versión de las gafas en realidad mixta. A finales de enero, al anunciar el cierre de su plataforma social en realidad virtual, AltSpaceVR, Microsoft había indicado que prefería centrarse en la realidad virtual y aumentada, y en el metaverso del lado empresarial y no del público en general. El nuevo comentario de la compañía también va en esta dirección, “ Podemos decir que no hay cambios para HoloLens 2 y nuestra apuesta por la realidad mixta ella aseguró.
En cuanto a la plataforma de gestión de proyectos de hosting y desarrollo de software, Github, adquirida en 2018 por Microsoft por 7.500 millones de dólares, anunció que se desprendería del 10% de su plantilla a finales de año, unas 300 personas. La subsidiaria también dejará todas sus oficinas, incluida su oficina central en San Francisco.
En un contexto económico sombrío, Microsoft no es la única empresa que ha decidido desprenderse de gran parte de su plantilla. Meta recortó más de 11.000 puestos de trabajo, Amazon recortó más de 18.000 y Twitter recortó más de la mitad de su plantilla a finales de octubre pasado. En su último informe trimestral, el gigante del software anunció su crecimiento más lento en seis años, con una facturación anual, igualmente, de 52.700 millones de dólares.