Un hombre de 29 años de Meppel defraudó a una mujer casi 38.000 euros fingiendo una relación amorosa con ella. El hombre fue condenado a un año de prisión suspendida y a 240 horas de servicio comunitario por fraude en citas y estafas en el Marktplaats.
El juez considera que el fraude en las citas es particularmente objetable. El hombre se acercó a la víctima en un sitio de citas a principios de febrero del año pasado. Las conversaciones continuaron vía WhatsApp. La enredaba en su dedo, pero siempre cancelaba las reuniones en el último minuto. La persuadió para que le transfiriera cantidades de dinero. El dinero invariablemente se destinaba al juego.
El juez dijo que el sospechoso dañó gravemente la confianza de la mujer con su comportamiento. “Él le causó mucha angustia emocional. También sufrió un daño financiero significativo”, dijo el juez. Según el juez, el Meppeler trabajó de manera refinada. Por ejemplo, ‘alquiló’ una casa de vacaciones para pasar un fin de semana con ella.
La mujer tuvo que pagar la mitad. La escapada de fin de semana finalmente se canceló debido a “circunstancias privadas del propietario”. Las aplicaciones del ‘propietario Kevin’ fueron elaboradas por el propio residente de Meppel. “Rebajado a malo”, dijo el juez. Además, el hombre defraudó a 35 personas durante un período de tiempo más largo a través de Marktplaats.
El hombre utilizó ocho cuentas bancarias diferentes, todas a su nombre. Cobró el dinero y no envió el producto solicitado. Este dinero también se destinó a su adicción al juego. El Ministerio Público (OM) solicitó una pena de prisión de ocho meses, de los cuales seis meses fueron condicionales, y 240 horas de servicios comunitarios.
El juez no cree que el hombre deba ir a la cárcel. “Eso se ajusta a los delitos cometidos, pero no a la persona”, afirmó el juez. El hombre mostró un verdadero arrepentimiento en la audiencia. Está recibiendo tratamiento por su adicción. Quiere resarcir a los perjudicados y tiene un administrador. “Un encarcelamiento frustrará esto”, dijo el juez. De Meppeler debe devolver a las víctimas de Marktplaats más de 900 euros y a la mujer casi 38.000 euros.