El ícono del tenis Boris Becker fue deportado a Alemania poco antes de Navidad, lo que redujo su sentencia de prisión en Gran Bretaña, que inicialmente se fijó en dos años y medio, a alrededor de ocho meses. Según un informe de los medios, el hombre de 55 años ahora podría saldar gran parte de sus deudas.
Según “Bild am Sonntag”, Boris Becker podría usar los ingresos de la entrevista televisiva en “Sat.1” para pagar sus deudas y finalizar el proceso de insolvencia que está en curso en Inglaterra. Según el diario, recibió una remuneración de 450.000 libras, unos 510.000 euros, por la entrevista que se emitió el pasado 20 de diciembre.
“Bild” se basa en una evaluación del abogado especialista Hans Georg Fritsche: “La parte del león debe ir a los acreedores”, estimó el experto desde lejos. No se puede estimar cuánto tiene que pagar Becker, “no hay porcentajes fijos por ley”. Según el informe, aún quedan pendientes de pago unos 431.000 euros.
El ex tenista de talla mundial tiene que pagar parte de la cuota a su esposa Lilly, de quien se separó en 2018. Juntos tienen un hijo de doce años, por quien Becker paga la manutención.
Becker de vuelta como un experto en televisión? “Tengo cuidado con lo que digo”
Como también informa “Bild” con referencia a los círculos judiciales ingleses, Becker ya ha podido pagar una gran suma al administrador concursal. Se dice que se pagó el equivalente a unos 483.000 euros como parte de un acuerdo de pago de ingresos.
Boris Becker fue declarado en bancarrota privada por un tribunal de Inglaterra en 2017, y sus activos fueron a parar al administrador concursal. Dado que se dice que Becker ocultó fondos, también fue condenado a prisión, que debía comenzar en abril. En una entrevista con “Sat.1”, Becker se mostró arrepentido y admitió su culpa.
No se le permite ingresar a Gran Bretaña por el momento, las asignaciones renovadas como experto en “Eurosport” son bastante concebibles, especialmente desde que Becker firmó un contrato con la emisora de nicho hace dos años hasta 2023. “Tengo ideas, pero me he vuelto cauteloso con lo que digo”, dijo Becker, quien está sujeto a la ley de insolvencia británica hasta que se pague la deuda y se levante la bancarrota. A diferencia de su propiedad, el administrador concursal no puede acceder directamente a sus ingresos.