Luiz Inácio Lula da Silva ha ganado la decisiva segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Brasil. La mayoría de los votos ya se han contado y con el 50,8 por ciento es una victoria estrecha para Lula. Su oponente, el actual presidente Jair Bolsonaro, recibió el 49,2 por ciento de los votos. Según la máxima autoridad electoral del país, el resultado está «matemáticamente decidido» y así Lula se convertirá en el nuevo presidente de Brasil.
Las encuestas ya pronosticaban que el expresidente de izquierda Lula ganaría las elecciones por un estrecho margen. El populista de derecha Jair Bolsonaro ya se cubrió: sugirió varias veces que no aceptaría una derrota porque el sistema electoral brasileño sería propenso al fraude. Copió esa táctica del expresidente estadounidense Donald Trump. Bolsonaro, como Trump, nunca ha demostrado que el sistema sea susceptible de fraude.
La primera ronda de votación se llevó a cabo a principios de octubre, pero no arrojó un ganador claro. Lula obtuvo entonces el 48 por ciento de los votos, Bolsonaro el 43 por ciento. Pero esa diferencia no era lo suficientemente grande. En esta ronda de votaciones, la elección fue simple: Lula o Bolsonaro.
Espectacular remontada de Lula
La victoria es una remontada espectacular para Lula. El político de 77 años también fue presidente de Brasil entre 2003 y 2010. Fue popular por sus políticas sociales que sacaron a millones de brasileños de la pobreza. Ha prometido volver a esa política.
Lula también prometió detener la destrucción de la región amazónica. Incluso quiere hacer de Brasil un líder mundial en la lucha contra el cambio climático.
Después de su período anterior como presidente, Lula fue acusado de corrupción. Pasó un año y medio en prisión por eso. En marzo de este año, la Corte Suprema revocó su condena. Se dice que el juez, Sergio Moro, ha sido parcial. Moro luego se convirtió en ministro de Justicia bajo Bolsonaro.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, felicitó rápidamente a Lula el domingo por la noche por la victoria. Llamó a las elecciones «libres, justas y creíbles». El presidente francés, Emmanuel Macron, también felicitó de inmediato a Lula y dijo que espera que Francia y Brasil fortalezcan sus lazos amistosos en el próximo período.
Preocupaciones sobre el proceso electoral
En el noreste de Brasil, Lula suele ser el más popular. Existía la preocupación de que a los votantes de esa región se les impidiera votar el domingo. Se dice que la policía erigió barricadas ilegales para los autobuses que transportaban votantes. Según los críticos, la policía está del lado de Bolsonaro.
El titular del Tribunal Supremo Electoral (TSE) dijo que no se ha impedido votar a nadie y que se han detenido todos los operativos policiales en las vías. «El único problema para los votantes fue que se retrasaron», dijo Alexandre de Moraes. Anunció una investigación sobre las acciones de la policía el día de las elecciones.