“Son cifras duras y, sin embargo, estoy contento con este crecimiento. Detrás de cada figura hay una familia a la que se le da un respiro y apoyo para detener la violencia”, dice Demir. “La ley sobre órdenes de alejamiento temporal data de 2013, pero ha sido letra muerta durante demasiado tiempo. Eso está claramente cambiando ahora”.
Desde 2020, Demir ha intensificado significativamente la lucha contra la violencia de pareja. Según ella, el crecimiento del número de THV se explica principalmente por la creciente concienciación de la policía y el ministerio público y el uso de recursos adicionales para orientar a las familias en una situación violenta.
Al imponer una orden de restricción temporal de hasta 14 días, la paz puede regresar y una familia puede buscar ayuda para sus problemas. La medida podrá prorrogarse por un máximo de tres meses tras una audiencia en el juzgado de familia. En la práctica, una orden de alejamiento temporal dura una media de casi 70 días, según las cifras del ministro.