El multimillonario Mark Cuban revela en una entrevista el consejo más importante de su padre, que todavía hoy influye decisivamente en su vida.
¿Quién es Mark Cuban?
Mark Cuban es un empresario estadounidense. En 1995 fundó el portal de vídeos Broadcast.com junto con su compañero de estudios Todd Wagner. Unos cuatro años más tarde, vendió el portal a Yahoo por unos 5.700 millones de dólares. Su entusiasmo por el baloncesto no sólo fue evidente en Broadcast.com. De retransmitir partidos de la NBA a convertirse en propietario mayoritario de los Dallas Mavericks, hizo posible este camino mediante la venta del portal de vídeos. Invirtió la friolera de 285 millones de dólares en 2000 para cumplir su sueño, según CNBC.
No fue hasta diciembre de 2023 que vendió el 58 por ciento de sus acciones en Mavericks. Según Forbes, por ello recibió alrededor de dos mil millones de dólares. Hoy, además de su pasión por el baloncesto, también es conocido por su voluntad de invertir. Entre otras cosas, aparece como miembro del jurado en la popular serie estadounidense “Shark Tank”. La serie ABC permite a las empresas jóvenes presentar sus propios productos para impresionar a los jurados y conseguir su apoyo financiero. En Alemania el concepto se conoce como “La Guarida de los Leones”.
El tiempo es limitado
A los 14 años, Cuban aprendió una lección importante de su padre. Norton Cuban trabajó alrededor de 60 horas a la semana durante la infancia de Mark Cuban. A veces su padre lo llevaba consigo a fregar los pisos. Pero el verdadero mensaje estaba en los detalles: debería aprender que trabajar para otros siempre conlleva limitaciones.
«Pasé ese tiempo no aprendiendo lo que hacía mi padre, sino aprendiendo que su trabajo no tenía futuro», le dice Cuban a CNBC Make It. «Su tiempo nunca fue suyo… quería que yo encontrara mi propio camino». Con la convicción de que «el tiempo es su activo más valioso», Cuban se centró en las oportunidades empresariales. A partir de entonces su objetivo fue claro: generar suficiente dinero para poder vivir su vida a su manera y no tener que rendir cuentas a nadie.
J. Vogel / equipo editorial finanzen.net