Una procesión silenciosa en Eindhoven, que pretendía recordar a todas las víctimas del conflicto entre Israel y Palestina, resultó ser una procesión dirigida principalmente contra Israel. Aunque los organizadores de Our Children Our Voice enfatizaron que tenía que ser una marcha silenciosa, todavía se gritaban consignas como ‘Palestina libre’ y ‘Terroristas israelíes’.
Unas quinientas personas asistieron a la marcha del domingo por la tarde. La organización intentó calmar a la multitud, pero no funcionó. Mucha gente seguía gritando consignas.
La procesión silenciosa comenzó en la plaza del 18 de septiembre y después los participantes se desviaron hacia Stadhuisplein. Allí se pronunciaron discursos y se leyeron los nombres de las víctimas.
“Es un viaje para todas las víctimas, tanto para los palestinos como para los israelíes”.
A las personas que participaron se les pidió que trajeran una vela de té o una luz LED y muchos participantes cumplieron. También acudieron vestidos de oscuro, tal y como solicitó la organización. “Es una procesión por todas las víctimas, tanto por los palestinos como por los israelíes”, afirma la mitad palestina Tanya Sanderink, de Hilvarenbeek, coorganizadora del desfile. Ella entiende que no ha sido un viaje silencioso. “Dadas todas las emociones que están sucediendo, lo entiendo”.
El viaje continuó pacíficamente y sin incidentes.