Estamos avanzando hacia un cambio de sentido en el aumento de salarios de los ministros y subsecretarios no elegidos en el parlamento. “Hemos pedido a los ponentes que retiren” la enmienda a la maniobra sobre los salarios de los ministros “y eviten polémicas innecesarias”. Así lo anunció la tarde del lunes 16 de diciembre a los diputados, reconociendo el reembolso de gastos. Así lleva más de dos años y así seguirá hasta el final de la legislatura. ¿Es esto correcto? No lo creo porque no tiene mucho sentido que el ministro del Interior o de Defensa reciba un trato diferente al de su subsecretario, pero hasta ahora nunca me ha importado, ni a mí ni a mis compañeros. Por este motivo pedimos a los ponentes que lo retiraran y evitar polémicas innecesarias. Lo que no sería comprensible para cualquier otra profesión, es decir, que dos personas que hacen el mismo trabajo, en la misma organización, tengan un trato diferente, debe ser tenido en cuenta para quienes trabajan en política.”
La enmienda de los ponentes y el clamor de la oposición
La enmienda a la que se refirió el titular de Defensa es la que contribuyó a paralizar el examen de la maniobra en la Comisión de Presupuesto de la Cámara. En particular, la propuesta de modificación de los ponentes equipara la remuneración de los ministros no parlamentarios con la de los electos. Un aumento que, según ha calculado Il Sole24 Ore, será de 7.193 euros mensuales para 17 de los miembros “técnicos” del gobierno Meloni: 8 ministros (entre ellos Crosetto) más otros 9 entre viceministros y subsecretarios. Las fuerzas de la oposición están alineadas contra la enmienda.
Maniobra en la cámara el miércoles sin acuerdo con la oposición
Debido al estancamiento, el proyecto de ley pasará a la Cámara el miércoles 18 de diciembre. De hecho, la conferencia de jefes de grupo ha certificado el retraso en el tiempo. Pero también ha sacado a la luz una brecha entre la mayoría y la oposición, que ahora corre el riesgo de complicar aún más el calendario. Más caos, por tanto, después de un fin de semana ya marcado por retrasos y tensiones, y en vísperas de una maratón nocturna que la mayoría espera concluir por la mañana, con el mandato al ponente antes de las comunicaciones del Primer Ministro con vistas al Consejo Europeo. Pero que la oposición podría obstaculizar, con el riesgo de que cualquier obstruccionismo condujera a un aplazamiento del horario de la Cámara, provocando así que se pospusiera la luz verde definitiva en el Senado entre Navidad y Año Nuevo.