Un ex paramilitar ruso que lucha en Ucrania prometió declarar contra el notorio grupo Wagner después de escapar dramáticamente y buscar asilo en Noruega.
Andrei Medvedev dice que es un excomandante de una unidad de Wagner que abandonó el frente en noviembre y se dio a la fuga hasta que trepó a través de dos vallas fronterizas en el norte de Noruega la semana pasada.
Tarjei Sirma-Tellefsen, jefe de personal de la policía en la región noruega de Finnmark, dijo que una patrulla fronteriza que también incluía militares arrestó al hombre el viernes temprano después de que cruzó ilegalmente desde Rusia.
La fuga de alto perfil de Medvedev es el primer caso conocido de un ex miembro de Wagner que deserta hacia el oeste desde que el presidente Vladimir Putin ordenó la invasión en febrero pasado.
En un video publicado el domingo por Vladimir Osechkin, un activista de derechos humanos ruso exiliado, Medvedev dijo que huyó del frente en noviembre después de cuatro meses de lucha en Ucrania.
Medvedev afirmó que Wagner había extendido su contrato indefinidamente después de que expiró y lo amenazó con represalias extrajudiciales si se negaba a pelear.
Andrei Medvedev dice que después de huir del frente, se escondió en Rusia durante dos meses antes de escapar a través de un río helado a Noruega © Gulagu.net
Dijo que pasó dos meses bajo tierra en Rusia, luego cruzó el río Pasvik cubierto de hielo, huyendo de los guardias que dispararon y enviaron perros para perseguirlo, hasta que llegó a Noruega.
Una vez allí, Medvedev pidió ayuda a una casa noruega cercana, dijo la policía.
La inteligencia noruega dijo que estaba siguiendo el caso, y el abogado de Medvedev dijo que estaba seguro de que las autoridades noruegas e internacionales querrían interrogarlo.
“Es obvio que lo examinarán de todas las formas posibles”, dijo Brynjulf Risnes, su abogado, a la emisora estatal NRK. “Primero, tienes que comprobar si lo que dice es cierto. Seguramente hay muchas personas que piensan que esto podría ser una provocación. Las autoridades noruegas probablemente mantendrán abiertas todas las opciones”.
Risnes le dijo a NRK que Medvedev ya había sido entrevistado por las autoridades de inmigración y que no había sospechas actuales de que haya cometido crímenes de guerra.
Wagner y su líder Evgeny Prigozhin, un ex proveedor de catering conocido como el «chef de Putin», han asumido un papel cada vez más destacado en el frente en Ucrania mientras el ejército regular de Rusia continúa luchando con problemas logísticos y de comando ineficientes.
La semana pasada, Wagner y el Ministerio de Defensa de Rusia afirmaron haber tomado la delantera en la captura de Soledar, la única ciudad en Ucrania que Rusia ha tomado después de que su ofensiva comenzara a fallar en el verano.
El raro éxito fue el primer reconocimiento oficial de alto nivel del papel de Wagner después de años de negar su participación en conflictos desde el este de Ucrania hasta Siria y África.
“El país debe conocer y conoce a sus héroes, tanto a los que sirven en las fuerzas armadas como al grupo Wagner”, dijo el lunes a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov. “Todos están trabajando por una causa común: todos están luchando por la patria”, dijo.
El despliegue de Wagner en áreas de primera línea como Bakhmut y Svatove, donde ha luchado en brutales batallas posicionales, ya era un secreto a voces cuando Prigozhin admitió que dirigió a Wagner, en septiembre de 2022.
Este movimiento fue parte de una campaña publicitaria destinada a establecerse como el líder de una facción de línea dura crítica tanto con el liderazgo militar de Rusia como con la élite oligárquica.
El apoyo incondicional de Prigozhin a la guerra y su reputación de brutalidad parecen haberle ganado al grupo un importante respaldo estatal, incluso cuando Wagner celebra en las redes sociales su propio papel aparente en los brutales asesinatos de cautivos ucranianos y de sus propios hombres.
El ex proveedor de servicios de catering ha recorrido prisiones abiertamente para reclutar convictos para luchar en Ucrania, mientras que Wagner ha aparecido de manera destacada en la televisión estatal y se ha anunciado para reclutas en vallas publicitarias en toda Rusia.
El Kremlin no ha confirmado que se estén utilizando convictos en los combates. Aún así, en diciembre, Putin otorgó a Aik Gasparyan, un luchador de Wagner y ladrón armado convicto, una medalla al “valor” en la víspera de Año Nuevo en una ceremonia pública.
Los medios vinculados a Wagner han publicado varios videos en los que Prigozhin promete disparar contra los «desertores». Un video de noviembre pasado parecía mostrar a uno de los combatientes ex convictos del grupo, Evgeny Nuzhin, siendo asesinado con un mazo.
Prigozhin se deleitó con la notoriedad: un canal vinculado a Wagner en la aplicación de redes sociales Telegram publicó una imagen de un mazo manchado con sangre falsa que supuestamente el jefe paramilitar envió al parlamento europeo. La empresa de catering de Prigozhin, Concord, publicó un mensaje de año nuevo con un pastel decorado con conejos armados con mazos.
Medvedev, que afirmó haber estado al mando de la unidad de Nuzhin, negó haber participado en crímenes de guerra, pero dijo que había visto a las fuerzas de seguridad internas de Wagner llevar a cabo múltiples ejecuciones de sus propios hombres si se negaban a luchar.
Dijo que los comandantes de Wagner eran indiferentes a si sus tropas vivían o morían, afirmando que entre 15 y 20 podrían morir en un solo día de combate.
“Existía el riesgo de que me agarraran y me mataran, me dispararan o hicieran algo peor, como le hicieron a Nuzhin, simplemente matarlo con un mazo”, dijo.
Información adicional de Anastasia Stognei en Riga