Por Isabel Panqueque
¡Gran decepción con la “Última Generación”! Los líderes de los criminales climáticos tuvieron que admitir internamente que su protesta no tuvo tanto éxito como esperaban…
“Hoy no estamos en el punto en el que nos gustaría estar, no estamos en el punto de lograr el gran cambio. Creíamos y esperábamos estar allí, pero al final nos equivocamos y tenemos que admitir que el viaje será más largo de lo que pensábamos”, dijo el caótico climático Kim Schulz en una llamada de información interna.
Los problemas de los radicales climáticos: mala comunicación, mucha burocracia, exigencias excesivas, conflictos internos, falta de espíritu comunitario, ¡muy poca gente!
¡Por eso los jefes de adhesivos climáticos han desarrollado una nueva estrategia! El foco: la masa. “Queremos tener suficiente gente para realizar ocupaciones masivas diarias y también para llevar a cabo bloqueos de carreteras diarios”, dijo un activista climático. También quieren teñir de naranja todo Berlín.
A partir del 13 de noviembre, la “Última Generación” también planea una forma de protesta completamente nueva: las llamadas “protestas de confrontación”. Un grupo de unas diez personas caóticas por el clima deben asistir a un evento político y perturbarlo ruidosamente, subir al escenario y quedarse quietos.
Habrá una protesta navideña la semana anterior a Nochebuena. La “Última Generación” se toma un descanso durante las vacaciones.