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Los principales partidos de Francia rechazaron una oferta del presidente Emmanuel Macron de formar una alianza antes de elecciones anticipadas en un intento por detener el ascenso de la extrema derecha de Marine Le Pen.
Macron tomó la impactante decisión de disolver la Asamblea Nacional el domingo por la noche después de que su alianza centrista sufriera una contundente derrota en las elecciones al Parlamento Europeo a manos del Rassemblement National de Le Pen. Justificó la apuesta de alto riesgo como necesaria para que los votantes establezcan una dirección clara para el país y pongan fin al estancamiento parlamentario existente desde que su alianza centrista perdió su mayoría en 2022.
A poco tiempo de la primera ronda de votación del 30 de junio, Macron hizo su discurso público ante partidos de centro izquierda como los Socialistas y los Verdes, así como ante Les Republicanins de centro derecha el domingo por la noche. Pero sus aliados potenciales hasta ahora han rechazado su oferta.
El líder de LR, Éric Ciotti, dijo que estaba “fuera de discusión entrar en una coalición con aquellos que tanto han dañado a Francia”. Las facciones de la izquierda, fragmentadas desde hace mucho tiempo, dijeron que buscarían formar listas conjuntas, pero dijeron que no a trabajar con el partido Renacimiento de Macron.
Las elecciones legislativas anticipadas podrían ser un punto de inflexión para la presidencia de Macron, a la que le quedan tres años de duración, y para la dirección futura de la democracia francesa. Es la primera vez en casi 30 años que un presidente acorta el mandato de la asamblea, una decisión que inquietó a los mercados el lunes.
“Estas serán las elecciones parlamentarias más importantes para Francia y para los franceses en la historia de la Quinta República”, dijo el lunes por la mañana el ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, en la radio RTL.
Stéphane Séjourné, el ministro de Asuntos Exteriores que también dirige el partido Renacimiento, dijo en la radio France Inter que esperaba “mantener conversaciones con todas las personas razonables con las que podamos trabajar y acordar nominaciones a aquellos que puedan unirse a nuestro proyecto”.
Tras un buen resultado en la votación del Parlamento Europeo, el secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, llamó a la izquierda a unirse para “crear un frente popular contra la extrema derecha”, pero rechazó cualquier acuerdo con el partido de Macron. Dijo que era “totalmente ilusorio” pensar que la izquierda firmaría el programa de Macron.
El único partido que tiene poca necesidad de alianzas es el RN de Le Pen, aunque uno de sus principales legisladores, Sébastien Chenu, dijo que políticos de otros partidos podrían unirse a su lista electoral si “compartieran la plataforma de propuestas que presentaremos”.
Si el RN gana una mayoría absoluta de escaños en la Asamblea Nacional, podría estar en el poder en la oficina del primer ministro en Matignon en unas pocas semanas y gestionar los asuntos internos de Francia. Semejante escenario no tendría precedentes: la extrema derecha nunca ha estado en el poder en Francia, salvo en la era de Vichy, después de una derrota militar ante Alemania.
Los votantes también podrían generar otro parlamento sin mayoría, lo que dificultaría que cualquier primer ministro gobernara el país. Pocos analistas esperan que la alianza centrista de Macron pueda obtener su propia mayoría absoluta.
Preguntado sobre las maniobras electorales en curso, Le Maire advirtió contra la apuesta por acuerdos “pequeños partidistas” para contrarrestar al RN. “No es así como responderemos a las preocupaciones, los temores y la ira de los franceses” que los están impulsando a votar por la extrema derecha, añadió.
El formato de dos vueltas de las elecciones para elegir a los 577 miembros de la Asamblea Nacional hace que el resultado sea particularmente difícil de predecir. Los votantes también pueden enviar a tres candidatos a la segunda vuelta, lo que abre la posibilidad de retiradas tácticas.
“Existe una confusión total en este momento tanto para los políticos de todos estos partidos como para los propios votantes”, dijo Mathieu Gallard, encuestador y analista político de Ipsos.
“Es imposible predecir cuáles serán los resultados, pero dadas las altas puntuaciones de la RN no se puede descartar por completo la posibilidad de que obtengan una mayoría absoluta. Entonces la táctica de Macron le habrá salido totalmente por la culata”.