Con unas precipitaciones previstas de hasta 10 litros por metro cuadrado de media, que a nivel local pueden llegar incluso a 20 o 25 litros, sigue siendo necesaria la vigilancia. Estas precipitaciones pueden provocar un aumento del nivel del agua, por lo que el fin de semana pasado Vlaamse Waterweg reparó proactivamente el dique de invierno en la cuenca de Blankaart. La presión del agua provocó pequeñas fugas, y esta reparación preventiva debería evitar problemas. Es recomendable permanecer alerta dadas las condiciones meteorológicas previstas.