El recuento, que se realizó del 24 de febrero de 2022 al 20 de febrero de 2024, no pretendía ser exhaustivo, subrayan los medios. Durante ese período, pudieron identificar hasta 45.123 soldados rusos muertos utilizando fuentes abiertas como obituarios, informes de autoridades locales y obituarios publicados en los medios de comunicación o en las redes sociales.
Mediazona y la BBC subrayan que el número real de muertos es ciertamente mucho mayor, posiblemente incluso el doble. Se dice que dos tercios de las víctimas no tenían ninguna conexión con el ejército antes de la invasión, es decir, eran soldados movilizados, voluntarios o prisioneros que se habían unido a unidades de combate a cambio de amnesia.
La última cifra oficial de muertos rusos data de septiembre de 2022, cuando el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, admitió la muerte de 5.937 soldados rusos. En agosto pasado, The New York Times, basándose en funcionarios estadounidenses, estimó las pérdidas militares rusas en 120.000 muertos. El 29 de enero de este año, el Secretario de Defensa británico, James Heappey, en una respuesta escrita a un miembro del Parlamento, estimó las pérdidas rusas en más de 350.000 muertos y heridos.