Diez importantes grupos automovilísticos y de motocicletas anunciaron el cierre de fábricas o congelaron las ventas a Rusia a medida que las consecuencias industriales de la invasión de Ucrania por parte del país se extendieron el miércoles.
Porsche y BMW se convirtieron en los últimos fabricantes de automóviles en cerrar plantas europeas debido a la falta de piezas de Ucrania, mientras que Toyota, Mercedes-Benz y Hyundai, que es una de las marcas más grandes de Rusia, dijeron que dejarían de fabricar en el país. Ford, Renault y BMW ya han cerrado plantas rusas.
Además, Mercedes-Benz, Toyota, Honda, Bentley, Aston Martin, Harley-Davidson y Rolls-Royce congelaron las ventas a Rusia, uniéndose a una lista creciente que abarca marcas desde Volvo y Jaguar Land Rover hasta Volkswagen.
Solo un puñado de marcas, incluidas Hyundai y Nissan, seguían importando vehículos al país hasta el miércoles por la noche. Avtovaz, propiedad de Renault, también seguía vendiendo su marca Lada. Renault ha detenido las ventas mientras su planta de Moscú está cerrada, debido a las dificultades para obtener piezas de Europa.
El martes, Carlos Tavares, jefe de Stellantis, que posee marcas desde Jeep y Peugeot hasta Fiat, dijo que estaba decidido a seguir vendiendo en el país “mientras las sanciones lo permitan”.
Con la invasión rusa en su séptimo día, las piezas esenciales de las plantas ucranianas cerradas comenzaron a secarse, lo que obligó a los fabricantes de automóviles de toda Europa a reducir la producción mientras buscan asegurar nuevos suministros.
Al mismo tiempo, un número cada vez mayor de marcas de automóviles que importan a Rusia están cancelando ventas debido a sanciones, falta de pago o daño a la reputación por operar en un país que corre el riesgo de convertirse en un paria.
La decisión de Bentley y Rolls-Royce de suspender las ventas al país siguió a un anuncio similar de Aston Martin el martes por la noche.
Bentley dijo que el mercado ruso representaba alrededor del 2 por ciento de su negocio, mientras que Aston dijo que era el 1 por ciento de las ventas.
McLaren y Lotus, otras dos marcas deportivas de lujo del Reino Unido, no tienen operaciones de ventas en Rusia, dijeron las compañías al Financial Times.
Honda, que canceló las ventas el miércoles, ya había dicho en diciembre de 2020 que tenía previsto abandonar el mercado ruso este año.
Porsche, que hasta el miércoles todavía entregaba autos al país, cerrará su fábrica en Leipzig, Alemania, hasta fines de la próxima semana, anunció la marca de autos deportivos respaldada por VW.
Se produce después de que BMW dijo el martes por la noche que las fábricas en Munich y Dingolfing en Alemania, y la planta de Mini en el Reino Unido, se verían obligadas a cerrar la próxima semana.
VW, propietaria de Porsche, ya cerró dos instalaciones en Europa y advirtió sobre más recortes debido a la dificultad para obtener repuestos.
A medida que se agota el flujo de componentes de Ucrania, los fabricantes de automóviles están evaluando las mejores formas de mantener en funcionamiento sus instalaciones europeas.
Otra importante marca de automóviles en Europa le dijo al Financial Times que tenía suficientes piezas para mantener sus fábricas en funcionamiento hasta la próxima semana, pero que podría verse obligada a cerrar después.
Tavares dijo el martes que el impacto en las plantas de la compañía, que incluyen sitios en Francia, Italia, Alemania, España y el Reino Unido, era actualmente «muy limitado» porque obtenía menos piezas que los rivales alemanes de Europa del Este.
Ucrania es un productor clave de arneses de cableado que sujetan los cables electrónicos dentro de un automóvil. Las fábricas en el país han estado cerradas durante la última semana.
Mientras que otros sitios en el este de Europa y el norte de África fabrican componentes similares, los expertos en cadenas de suministro dicen que las plantas de automóviles tardarán tiempo en obtener las piezas que necesitan, lo que puede implicar el traslado de algunos equipos fuera del país.
El grupo de piezas Aptiv, que tiene dos instalaciones en Ucrania, ya ha trasladado algunos kits fuera del país a otros sitios para tratar de mantener la producción.