Los pilotos holandeses vieron al oponente como puntos lejanos, mientras los sensores del F-35 escaneaban la aeronave. La formación de tres voló desde el enclave ruso de Kaliningrado hacia Polonia, pero permaneció dentro de los límites del espacio aéreo internacional. Los F-35 holandeses tenían que estar atentos si seguía así. Los rusos eran inalcanzables por radio y no tenían ningún plan de escape. ¿Es eso una provocación?