Los productores de gas natural licuado de EE. UU. han anunciado una serie de acuerdos para impulsar las exportaciones a medida que la industria capitaliza la escasez que ha dejado a Europa con una creciente crisis energética.
Cheniere Energy, el mayor exportador estadounidense, dijo que había llegado a una decisión final de inversión para seguir adelante con un proyecto que aumentará su capacidad en más del 20 por ciento para fines de 2025, mientras que los acuerdos de suministro a largo plazo también aseguraron compras de gas estadounidense durante las próximas décadas.
La expansión de las instalaciones de Cheniere en Corpus Christi, en la costa de Texas, agregará 10 millones de toneladas al año de capacidad de licuefacción además de los 45 millones de toneladas actuales. La capacidad total de EE. UU. es de aproximadamente 99 millones de toneladas.
El anuncio se produjo en medio de una serie de acuerdos de compra y venta de GNL de EE. UU. revelados el miércoles, ya que los exportadores estadounidenses se posicionan para llenar el vacío a medida que Europa se aleja de las importaciones rusas.
Venture Global, otro exportador en la costa del Golfo de México, dijo que había llegado a un acuerdo para vender 2 millones de toneladas por año a la petrolera Chevron durante un período de 20 años. Cheniere también firmó su propio acuerdo con Chevron por 2 millones de toneladas al año durante un período de 15 años.
El acuerdo de Venture Global marcó el segundo contrato importante de la compañía en la misma cantidad de días después de que anunciara planes el martes para vender 1,5 millones de toneladas al año a EnBW, una de las compañías energéticas más grandes de Alemania, en el primer acuerdo vinculante a largo plazo de una empresa alemana para comprar GNL estadounidense.
Mientras tanto, el grupo de productos químicos Ineos anunció planes para comenzar a comercializar GNL. Según el acuerdo, que se encuentra en una etapa anterior a los demás, la empresa privada más grande de Gran Bretaña compraría 1,4 millones de toneladas por año durante 20 años del combustible de los proyectos propuestos por la empresa estadounidense Sempra Infrastructure.
Los precios del gas en Europa han subido más de una cuarta parte durante la última semana después de que Rusia redujera la capacidad de su principal gasoducto de exportación de gas a Alemania, lo que generó preocupaciones de que Moscú está utilizando sus exportaciones de gas como arma en respuesta a las sanciones de la UE tras la invasión de Ucrania.
Fatih Birol, jefe de la Agencia Internacional de Energía, dijo que Europa debe prepararse de inmediato para la interrupción total de las exportaciones de gas ruso este invierno, instando a los gobiernos a tomar medidas para reducir la demanda y mantener abiertas las centrales nucleares envejecidas.
Europa ahora importa alrededor del 20 por ciento de su gas de Rusia, según los analistas, en comparación con aproximadamente el 40 por ciento antes de la invasión de Ucrania.
Estados Unidos es el principal productor mundial de gas natural y sus exportadores han estado operando plantas a toda máquina en los últimos meses para aumentar los suministros a la UE.
Sin embargo, un incendio reciente en una terminal de GNL en Texas, que es responsable de casi el 20 por ciento de toda la capacidad de licuefacción de EE. UU., ha reducido el suministro y ha ayudado a subir los precios en Europa, que se cotizaban por encima de los 125 € por megavatio hora el miércoles.
La UE y Washington anunciaron un acuerdo en marzo para aumentar el suministro de GNL a Europa en los próximos años en un esfuerzo por ayudar al bloque a dejar de depender del gas ruso.
Ineos, propiedad de Jim Ratcliffe, tiene un negocio en expansión que abarca petroquímicos, refinerías y producción de petróleo y gas.
La compañía dijo que su acuerdo con Sempra era parte de una estrategia para construir una red de capacidad de licuefacción, envío y regasificación para entregar “energía confiable” a sus operaciones y clientes en Europa y en todo el mundo.
“Nuestra entrada en el mercado global de GNL abre nuevas oportunidades para suministrar energía asequible, limpia y confiable al mercado”, dijo Brian Gilvary, exejecutivo de BP que ahora dirige Ineos Energy. “Suministro a largo plazo. . . ayudará a aliviar los problemas energéticos estructurales en Europa”.
El acuerdo está sujeto a que Sempra obtenga los permisos y el financiamiento para seguir adelante con dos nuevos proyectos.
Ineos está ingresando a un mercado dominado por grandes compañías petroleras y comerciantes de productos básicos. Vitol, el comerciante de petróleo independiente más grande del mundo, entregó casi 13 millones de toneladas de GNL el año pasado.