El viaje de esquí de los estudiantes de la Utrechtsche Vrouwen Studenten Vereeniging (UVSV) y el Utrechtsch Studenten Corps en Risoul a finales de marzo resultó literalmente repugnante para algunos de ellos. Las cosas salieron mal durante el après-ski: los estudiantes se enfermaron dos tardes consecutivas. Se desplomaron espontáneamente sobre sus piernas, comenzaron a temblar violentamente, alternando ataques de llanto y risa y sus ojos en blanco. En ambas noches, dos estudiantes estaban en tan mal estado que tuvieron que ir al hospital.