Los conservadores de Rishi Sunak enfrentaron derrotas aplastantes en las elecciones locales del Reino Unido el viernes, cuando los votantes en muchas partes de Inglaterra se volvieron contra el partido después de un año tumultuoso.
El primer ministro se despertó con la noticia de que su partido estaba contra las cuerdas, con los laboristas avanzando en el norte y Midlands y los demócratas liberales avanzando en las zonas ricas del sur.
Los primeros resultados sugirieron que los conservadores podrían perder hasta 1.000 escaños en el consejo en comparación con su posición antes de las elecciones, coincidiendo con algunas de las predicciones más pesimistas del partido.
Pero el conteo de la noche a la mañana solo tuvo lugar en aproximadamente una cuarta parte de los 8,000 asientos en juego, y Sunak y sus rivales tendrán que esperar a que lleguen más resultados para evaluar el panorama completo.
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Los laboristas tomaron el control del Consejo de Medway en Kent, arrebatándoselo a los tories por primera vez en 20 años. El partido también tomó el control del Ayuntamiento de Plymouth, en el suroeste de Inglaterra, junto con Stoke-on-Trent, parte del antiguo “muro rojo” que cayó ante los conservadores de Boris Johnson en las elecciones de 2019.
Los laboristas dijeron que los resultados mostraban que el partido estaba ganando el tipo de escaños que necesitaba para recuperarse en las elecciones generales que se esperan para el próximo año. “Estos resultados muestran que vamos camino de un gobierno laborista mayoritario”, dijo Shabana Mahmood, jefa de campaña laborista.
Pero los primeros resultados sugieren que el líder laborista Sir Keir Starmer todavía tiene mucho trabajo por hacer; el botín fue compartido por los demócratas liberales y los verdes.
A las 7 a.m., los conservadores habían perdido el control general en varios otros consejos, incluidos Brentwood en Essex, Tamworth en Staffordshire, Hertsmere en Hertfordshire, East Lindsey en Lincolnshire y North West Leicestershire.
Aunque no hubo confirmación oficial, los demócratas liberales dijeron que estaban «seguros» de haber tomado el control del consejo de Windsor y Maidenhead, un área que incluye la circunscripción parlamentaria sólidamente conservadora de la ex primera ministra Theresa May.
Justo antes de las 7 de la mañana, los laboristas habían ganado 107 escaños en comparación con su posición inmediatamente antes de las elecciones, mientras que los demócratas liberales habían ganado 42 y los conservadores habían perdido 134.
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El experto en encuestas, Sir John Curtice, escribió en el sitio web de la BBC que era posible que los conservadores alcanzaran el umbral de 1.000 escaños perdidos, pero agregó que las ganancias se estaban dividiendo de manera más equitativa de lo esperado entre los laboristas y los demócratas liberales.
“Los laboristas estarán decepcionados de que parezca que su voto está simplemente a la par con su desempeño en las elecciones locales del año pasado, aunque los conservadores todavía están cinco puntos por debajo de hace 12 meses”, escribió Curtice.
Desde la última serie de elecciones locales, los tories han tenido tres primeros ministros —Johnson, Liz Truss y Sunak— y han presidido un período de caos político y económico.
“Sobre los resultados declarados hasta ahora, confiamos en que los laboristas tendrán una ventaja equivalente en el porcentaje de votos de al menos ocho puntos, lo que representaría nuestro mejor resultado desde 1997”, dijo un portavoz laborista alrededor de las 6 a.m.
Munira Wilson, la parlamentaria liberal demócrata de Twickenham, dijo que parecía una “noche fantástica” para su partido. “Estamos logrando avances en todo el país”, dijo.
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El partido Conservador, a cargo a nivel nacional en Westminster, aceptó que enfrentaron pérdidas significativas.
“Esta será una noche difícil para los conservadores”, dijo el partido. “Cualquier gobierno que haya estado en el poder durante 13 años tiene muchas probabilidades de perder escaños”.
El ministro de veteranos, Johnny Mercer, que representa a Plymouth Moor View, dijo que había sido una “noche terrible” para los conservadores.
Es probable que las elecciones locales sean la última gran prueba de la opinión pública en las urnas antes de las elecciones generales, previstas para el verano u otoño de 2024.
Las elecciones para los distritos que se disputan el jueves se llevaron a cabo por última vez en 2019, cuando los conservadores de May y los laboristas de Jeremy Corbyn obtuvieron malos resultados.
Curtice ha dicho que los laboristas necesitan una ventaja de dos dígitos en el porcentaje de votos en las elecciones para asegurarse una mayoría parlamentaria en las elecciones generales.
Datos y gráficos por Oliver Hawkins, Ella Hollowood y Martín Stabe