El gobierno federal decidió anoche reducir significativamente el aumento de impuestos previsto para los vehículos de empresa fósiles. Quienes vayan al trabajo en tren o en bicicleta también pueden encontrarlo más barato. ¿Qué significa esto para usted?
Escenario 1: tienes un coche de empresa
Cualquiera que tenga un coche de empresa verá aparecer cada mes en su nómina la “prestación en especie” (VAA). Este impuesto no sólo lo determina el CO2emisiones del coche en cuestión, sino también las del resto de la flota. Dado que este último ha disminuido drásticamente, los empleados con un coche de empresa que funciona con diésel o gasolina se vieron de repente en peligro de pagar hasta 500 euros de impuestos adicionales al año. Esto implicaría a unas 800.000 personas.
Gracias a un nuevo método de cálculo, este aumento de impuestos se reduce a unos pocos euros al mes. A partir de ahora los coches eléctricos pesarán menos en el cálculo de la media de CO2emisiones. Ahora también se tienen en cuenta valores de emisiones más realistas.
Tomemos como ejemplo el popular BMW X1 con un precio de catálogo de 38.500 euros. Quienes optaron por esto normalmente vieron aumentar su VAA de 171 euros a 216 euros al mes. Ahora serán 178 euros. Un aumento de 7 euros en lugar de 45 euros al mes. El BMW X3, más lujoso, normalmente costaría 319 euros al mes en lugar de 269 euros. Serán 277 euros. Un aumento de 8 euros en lugar de 50 euros. El Volvo XC40 será 7 euros más caro en lugar de 54 euros. El Skoda Kodiaq cuesta 7 euros en lugar de 52 euros.
Nada cambiará para los usuarios de vehículos comerciales eléctricos e híbridos.
Escenario 2: vas en bicicleta al trabajo
Desde este año, la exención fiscal sobre los subsidios para bicicletas se ha incrementado a 35 céntimos de euro por kilómetro. Si recibe esta cantidad máxima de su empleador, puede acumular un buen fondo de ahorro. Quien viaja largas distancias con regularidad corre el riesgo de alcanzar el límite fiscal de 2.500 euros al año. Cualquiera que supere esa cantidad pagará impuestos sobre esa cantidad adicional.
El Gobierno ha decidido ahora aumentar el límite máximo de 2.500 a 3.500 euros. Pero para beneficiarse de esto, hay que andar mucho en bicicleta y vivir lejos del trabajo. Por ejemplo, cualquiera que viva a sólo 5 kilómetros de su trabajo y viaje en bicicleta 100 días al año recibirá anualmente 350 euros de subsidio para bicicletas. Esto le deja muy por debajo del límite máximo de 2.500 euros y, por tanto, no se beneficiará del nuevo régimen.
Para beneficiarse del aumento del límite máximo, debe desplazarse en bicicleta 220 días al año, recibir el subsidio completo para bicicletas de 35 céntimos por kilómetro y vivir al menos a 16,2 kilómetros de su trabajo. Por ejemplo, si recorre en bicicleta 40 kilómetros de ida y vuelta al día, recibirá un subsidio de bicicleta de 3.080 euros al año. Hasta ahora, 2.500 euros estaban exentos de impuestos, pronto serán 3.500 euros. El beneficio es de 25 euros netos al mes. Quien recorra en bicicleta 50 kilómetros de ida y vuelta cada día ganará 43 euros netos al mes.
En definitiva, merece la pena plantearse dejar el coche a un lado.
Escenario 3: tienes un abono de tren del trabajo
Hoy en día, alrededor de 100.000 belgas tienen que pagar ellos mismos parte del abono de tren desde el trabajo. Dependiendo de su convenio colectivo de trabajo, la contribución de su empleador asciende al 56 por ciento del precio total de suscripción. El resto lo pagan de su propio bolsillo.
Si los empleadores están dispuestos a aumentar esa contribución al 71,8 por ciento, el gobierno promete imponer un 7,5 por ciento adicional a partir de ahora. Como resultado, los empleados sólo tendrán que pagar ellos mismos alrededor del 20 por ciento de su suscripción.
Lo que esto significa en términos concretos depende de la distancia entre el hogar y el lugar de trabajo. Por ejemplo, quien recorra entre 1 y 3 kilómetros diarios en tren sólo pagará 90 euros al año en lugar de 198 euros por su abono de tren. Quien recorra unos 30 kilómetros pagará 289 euros al año en lugar de 639. Para una distancia de aproximadamente 150 kilómetros, la aportación personal asciende a 787 euros.