Por Dirk Böttger y BZ/dpa
La Última Generación ha iniciado protestas en varias ciudades; el aeropuerto de Berlín-Brandenburgo también se ha visto afectado.
En la pista sur hay al menos dos pegatinas climáticas. Hay un agujero en la valla. La policía está de guardia y un helicóptero sobrevuela la zona.
Las operaciones de vuelo fueron interrumpidas temporalmente, pero según la Policía Federal se reanudaron poco antes de las 7 de la mañana. Inicialmente no hubo información del aeropuerto.
Según la organización, dos radicales climáticos, cada uno con chalecos reflectantes de color naranja, entraron en los terrenos de los aeropuertos de Berlín-Brandenburgo, Stuttgart, Núremberg, Colonia-Bonn y Karlsruhe.
Ellos “expresaron pacíficamente su oposición exhibiendo pancartas que decían “El petróleo mata” y “Firma el tratado”, informó la organización, según el comunicado. “No se entró en las pistas”.