El banco central de Rusia comenzará a comprar oro después de una pausa de dos años, ya que los productores nacionales del país enfrentan problemas para acceder a los mercados internacionales de lingotes.
En un comunicado, el Banco de Rusia dijo que “reanudaría la compra de oro en el mercado nacional de metales preciosos”.
La medida se produce después de que el banco central y varios de los mayores prestamistas del país fueran sancionados en respuesta a la invasión rusa de Ucrania.
Los analistas han advertido que es probable que a los productores rusos como Polymetal o Polyus les resulte muy difícil vender oro en Londres o Nueva York.
Como tal, se esperaba que estas empresas recurrieran al banco central ruso, que puede proporcionar los rublos que necesitan para pagar al personal y los suministros a cambio de oro.
El Banco de Rusia poseía poco menos de 2.300 toneladas de oro a finales de noviembre, según el Consejo Mundial del Oro.
A los precios actuales, su tesoro de metal, el sexto más grande del mundo, tiene un valor de $ 153 mil millones y representa aproximadamente una quinta parte de las reservas oficiales del banco.
Tras la anexión de Crimea en 2014, el banco central intensificó su compra de oro mientras los productores nacionales luchaban por vender en el extranjero.
Entre 2014 y 2019 adquirió más de 1.200 toneladas de oro, según datos de WGC.
Para Moscú, las compras también fueron una forma de reducir la exposición del país a dólares estadounidenses en sus reservas oficiales.
El Banco de Rusia detuvo las compras en abril de 2020 cuando los precios del petróleo se desplomaron debido a la pandemia, afectando la renta nacional del país. Ha mantenido su reserva constante desde entonces.
“Es probable que el mercado lo considere inicialmente optimista, pero el propósito de comprar oro (en el mercado interno) es monetizarlo cuando sea necesario”, dijo Nicky Shiels, analista de MKS Pamp. “Uno construye un cofre de guerra de este tamaño para tiempos como estos”.