Lo que mantiene al mundo en marcha: la comunicación

¿Qué se entiende por comunicación?
Desde un punto de vista puramente técnico, la comunicación no es más que el intercambio de información entre un remitente y uno o más destinatarios. Pero lo que se quiere decir es comunicación entre ellos. Desde que existe el ser humano, la comunicación ha sido la base de la convivencia. Puede salvar la supervivencia o prevenir guerras, hay muchos ejemplos. El lenguaje se puede utilizar para intercambiar pensamientos, ideas o sentimientos. O puedes comunicarte mediante signos, es decir, sin palabras, pero con gestos y expresiones faciales. Pero la comunicación no es sólo una capacidad humana: muchos animales también tienen sistemas de comunicación complejos: además de señales visuales, se comunican mediante sonidos y olores. Pero ningún otro ser vivo ha perfeccionado tanto la comunicación como nosotros, los humanos, porque podemos hablar.

Los jóvenes utilizan cada vez menos el teléfono. ¿Que esta pasando ahí?
De hecho, los estudios realizados entre jóvenes muestran muy claramente que utilizan cada vez menos el teléfono. En su lugar, envían, por ejemplo, mensajes de voz. Eso significa, esencialmente, que están haciendo una especie de llamada telefónica igualada. Envías algo y luego tienes tiempo de esperar la respuesta y reaccionar según tu propio criterio. Estos son gestos tan pequeños, tal vez se podría decir, de autodefensa en tiempos de bombardeo constante con información y mundos emocionales.

El mundo digital de la comunicación: ¿qué nos hace como seres humanos?
La red global de comunicaciones tiene un enorme impacto en nosotros. Todavía no somos plenamente conscientes de la dimensión psicológica. En el pasado, el mundo cotidiano de la gente era una pequeña isla de simultaneidad, rodeada por un gran imperio del pasado, porque todas las noticias que llegaban desde grandes distancias eran inevitablemente viejas: días, semanas e incluso años. Gracias a las telecomunicaciones globales, la Tierra entera se ha convertido en un lugar de simultaneidad. Esto significa que una avalancha de acontecimientos, incluso desde regiones lejanas de la tierra, presiona al individuo emocionalmente. Esto puede ser abrumador, por lo que tenemos que aprender a lidiar con la sobredosis diaria de eventos mundiales.

¿Cuánta comunicación necesita la gente?
Prefiero preguntar: ¿cuántos medios de comunicación necesita la gente? Y hay buenas noticias: nosotros mismos decidimos cuánta tecnología permitimos en nuestras vidas cuando presionamos el botón de parada y decimos: ya no me pueden localizar. Ahora no estoy perfectamente informado, no tengo que presentarme ahora, solo soy yo, un ser humano imperfecto en un mundo no digital. Tenemos esta libertad. Y deberíamos tomar esta libertad de vez en cuando.



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